La reconstrucción del desastre provocado por el potente terremoto del sábado en Ecuador será muy larga y muy costosa, dijo este lunes el presidente Rafael Correa.
«Habrá que reconstruir Pedernales, el centro de Portoviejo, el barrio de Tarqui en Manta, Canoa, Jama… Eso tomará meses, años y costará centenas, probablemente miles de millones de dólares», aseguró durante una visita a Pedernales, el epicentro del terremoto, severamente golpeado por el sismo.
El sismo, el más fuerte en el país desde 1979 y que fue sentido también en Colombia y Perú, ocurrió sobre las 19H00 (00H00 GMT) del sábado.
Tuvo una magnitud de 7,8 grados y una duración de aproximadamente un minuto, afectando sobre todo a seis provincias de la costa ecuatoriana, de sur a norte, donde dejó numerosos edificios caídos y carreteras destrozadas.
El vicepresidente Jorge Glas aseguró el lunes a la AFP que «hay fondos contingentes que ya se han activado: 300 millones de dólares para emergencias, 150 millones para reconstrucción porque después de esto viene la reconstrucción».
Además, el país, muy golpeado por la caída del crudo, contará con líneas de financiamiento del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo por 600 millones de dólares para afrontar esta catástrofe.
‘»Muchos edificios se derrumban por mala construcción»
Correa también aseguró que muchos edificios se derrumbaron en el potente terremoto «por mala construcción» y pidió que el país saque «lecciones para el futuro» de esta dolorosa experiencia.
«Muchos edificios se derrumban por mala construcción. Nadie quiere eludir responsabilidades, pero esa responsabilidad es sobre todo de los gobiernos locales», dijo.
«De esta dolorosísima experiencia, ojalá saquemos lecciones para el futuro. Después del terremoto de Haití, se empezaron a estudiar normas de construcción mucho más fuertes, que se aplican ya en 2014, pero antes de eso realmente había construcciones tremendamente precarias y por eso tal vez los daños son mayores», agregó el mandatario.
Rafael Correa emplazó además al país a ser «más estrictos en las normas de construcción».
«En un terremoto de casi 8 grados en la escala Richter, aquí, en Japón y Estados Unidos van a derrumbarse edificios, pero probablemente menos edificios y de forma menos catastrófica. Aquí hay edificios que se fueron compactando, achatando, y eso es falla estructural», agregó.