La FIFA creará una comisión fiscalizadora que se asegurará de que haya «condiciones de trabajo decentes» en la construcción de estadios para el Mundial 2022 en Catar, dijo el viernes el presidente del organismo Gianni Infantino.
Durante su primera visita de trabajo a Catar, Infantino dijo que el grupo incluirá a los «sectores pertinentes de la sociedad civil y otros sectores pertinentes de la FIFA».
Grupos defensores de los derechos humanos y sindicatos suelen acusar a Catar de abusos y muertes en los proyectos de construcción vinculados con el Mundial desde que obtuvo la sede en 2010.
La semana pasada, un experto en derechos humanos de la Universidad de Harvard designado por la FIFA aconsejó que se retiren los torneos de países donde persisten los abusos.
«Tomamos nuestra responsabilidad en serio y estamos comprometidos a cumplir con lo que nos corresponde», dijo Infantino.
El presidente del organismo rector del fútbol mundial visitó la obra del Estadio Internacional Khalifa en Doha y los alojamientos de los trabajadores durante una visita de dos días. También se reunió con el emir, jeque Tamim bin Hamad Al-Thani.
Amnistía Internacional elogió los «pasos en la dirección correcta» que anunció el presidente de la FIFA, elegido al cargo hace dos meses.
«Finalmente, parece que la FIFA está despertando al hecho de que a menos que implemente medidas concretas, la Copa del Mundo de 2022 en Catar será fundada en la sangre, sudor y lágrimas de obreros migrantes», dijo Mustafa Qadri, un vocero de Amnistía experto en derechos de obreros migrantes en la región del Golfo Pérsico.
El emirato gastará decenas de miles de millones de dólares antes del torneo que se disputará entre noviembre y diciembre de 2022. Construirá y remodelará ocho estadios, además de gastar una fortuna en proyectos de transportación y otra infraestructura.
Catar depende mayormente de obreros del sur de Asia que son contratados con el sistema de «kalafa» que es común en las naciones del Golfo, y que según sus críticos fomenta la explotación de los migrantes.
El profesor de Harvard, John Ruggie, dijo la semana pasada que la FIFA debió haber recibido garantías de Catar de que el sistema «kalafa» no sería utilizado para ningún proyecto relacionado con el Mundial cuando empezó al campaña de candidaturas den 2009.
Aunque las autoridades cataríes han prometido reformas, el progreso con las nuevas leyes ha sido lento.
«La FIFA y yo confiaremos en la palabra de las autoridades cataríes, y espero acciones concretas que serán la verdadera prueba de la buena voluntad», dijo Infantino, quien agregó que «confío que vamos por el camino correcto».
El jefe del comité organizador local, Hassan al Thawadi, dijo que la primera Copa del Mundo en el Medio Oriente cumplirá con todos los requisitos.
«También estamos comprometidos con dejar un legado después del torneo, incluyendo en cuanto al bienestar de los trabajadores», dijo Al Thawadi en un comunicado.