El Leicester dejó escapar la primera oportunidad de asegurar el título de la Premier al empatar el domingo 1-1 ante el Manchester United y colocarse a dos puntos del campeonato más improbable del fútbol inglés.
El Tottenham, que se encuentra a ocho puntos del Leicester, debe vencer el lunes al Chelsea para mantener vivas sus esperanzas del campeonato.
El Leicester se recuperó tras ponerse en desventaja con el gol de Anthony Martial a los ocho minutos, luego de que el capitán Wes Morgan rematara de cabeza un tiro libre para empatar las acciones a los 17 minutos. El mediocampista del Leicester, Danny Drinkwater, fue expulsado a los 86 minutos luego de ver su segunda tarjeta amarilla.
El triunfo le habría asegurado el título al Leicester, un equipo modesto de la región central de Inglaterra y que apenas logró la permanencia la temporada anterior. Los juegos restantes del Leicester son en casa ante el Everton y visitando al Chelsea.
Al no conseguir el triunfo, el United se quedó en la quinta posición y perjudicó sus esperanzas de clasificar a la Liga de Campeones. Pero el duelo se centró en el Leiecster y en el hecho de que el equipo de Claudio Ranieri que inició la campaña con momios de 5.000 a 1 de obtener el campeonato pudiera lograr lo que parecía imposible, una hazaña que los colocaría entre las grandes sorpresas deportivas de la historia.
El equipo conocido como los Foxes, sigue siendo uno de los favoritos, y su grupo de vocales aficionados cantó «Ganaremos la liga» en repetidas ocasiones tras el silbatazo final. Pero los Spurs aún tienen esperanza antes de su duelo en Stamford Bridge.
Los seguidores del United aplaudieron a los jugadores del Leicester cuando salían del campo en Old Trafford.
Los jugadores del Leicester apenas habían cruzado la mitad del terreno cuando ya estaban en desventaja. El colombiano Antonio Valencia recortó al centro desde la derecha y mandó un servicio a los pies de Martial, quien remató con potencia para superar al arquero Kasper Schmeichel.
El cuadro de Ranieri ha confundido a sus detractores toda la temporada, y respondió con su primera oportunidad real del encuentro.
Morgan ganó el duelo personal a Marcos Rojo y se abrió camino en el área chica para rematar el cobro de tiro libre de Drinkwater y vencer al arquero David de Gea, quien tuvo poca oportunidad de atajar el balón.
En otro encuentro, un doblete de Andre Ayew encaminó al Swansea a un triunfo de 3-1 sobre un cuadro del Liverpool que resintió la ausencia de varios titulares.
El Liverpool descansó a varios de sus jugadores antes del encuentro de vuelta de las semifinales de la Liga de Europa ante el Villarreal, y pagó el precio, además de sufrir la expulsión de Brad Smith a los 76 minutos y ya con la pizarra 3-1.
Ayew abrió el marcador a los 20 minutos al rematar un tiro de esquina, y Jack Cork duplicó la ventaja con un colocado disparo desde los linderos del área.
Christian Benteke remató de cabeza un tiro de esquina para recortar distancia a los 65 minutos, pero Ayew puso la pizarra definitiva dos minutos después.
Con la victoria, el Swansea garantizó su permanencia en la Premier para la siguiente temporada.