Treinta y siete migrantes originarios de Asia fueron detenidos en el noroeste de Colombia tras haber sido «abandonados» por traficantes de personas luego de haber ingresado ilegalmente al país.
«Entre los migrantes se encuentran 36 hombres y una mujer», dijo la Armada Nacional de Colombia en un comunicado, que detalló que los detenidos provienen de Bangladesh (15), Nepal (nueve), India (ocho) y Pakistán (cinco).
Estas personas fueron localizadas por infantes de Marina en el municipio de Riosucio, en el selvático departamento de Chocó, limítrofe con Panamá, tras haber sido «abandonadas por los sujetos que las transportan de un país a otro», agregó el comunicado.
Los 37 extranjeros, que no presentaron documentos que permitieran su estancia en Colombia, fueron trasladados a la localidad de Turbo, en el Golfo de Urabá, en donde recibieron alimentación, atención médica y fueron puestos a disposición de las autoridades migratorias, de acuerdo con el texto.
En los últimos 15 días, se han detectado a más de 750 migrantes irregulares en diferentes carreteras del país, según cifras oficiales.
Colombia ha expulsado en 2016 a más de 6.000 indocumentados, casi 4.000 de ellos detenidos en las localidades de Turbo y Capurganá, donde en los últimos meses se ha detectado un creciente tráfico de personas.
Por este motivo, desde el pasado 9 de mayo Panamá ha reforzado los controles fronterizos para frenar el flujo de migrantes.