El paraguayo Nicolás Leoz, ex presidente de la Conmebol y ex miembro del comité ejecutivo de FIFA, apeló un plazo perentorio de diez días para presentar su defensa en un pedido de extradición, por lo que nuevamente se ha demorado su probable traslado a Estados Unidos, donde enfrenta distintos cargos.
El dirigente de 87 años estuvo al frente del organismo del fútbol sudamericano desde mayo de 1986 hasta abril de 2013 cuando presentó su renuncia y fue reemplazado por el uruguayo Eugenio Figueredo.
En 2014, Figueredo dimitió y se hizo cargo de la presidencia el paraguayo Juan Angel Napout, quien a fines de 2015 presentó también su renuncia.
Los tres ex presidentes están acusados de haber recibido millonarios sobornos de empresas poseedoras de derechos de transmisión televisiva para los torneos Copa América y Copa Libertadores hasta el 2023.
«La apelación la presenté porque el tratado de extradición firmado entre Estados Unidos y Paraguay dice que el país que quisiera procesar a una persona tiene 60 días de plazo para presentar el pedido», explicó el sábado Ricardo Preda, abogado de Leoz, en una entrevista con The Associated Press.
«Estados Unidos tuvo 60 días para enviar su exhorto de extradición; entonces, por un criterio de equidad de partes, pedidos al juez Humberto Otazú, que entiende el caso Leoz, que nos otorgue 60 días para elaborar nuestro alegato de defensa», añadió el letrado.
Leoz cumple reclusión domiciliaria por orden de Otazú desde junio de 2015 pero está autorizado a ir al hospital de su propiedad para recibir tratamiento médico tres veces por la semana.
Preda advirtió que, básicamente, «presentaré mi oposición al pedido de Estados Unidos porque no existe en Paraguay una ley que administre los trámites de extradición. En términos sencillos, no hay una reglamentación juridico para discutir las extradiciones».
El profesional aclaró que el juez Otazú tendrá que remitir en la próxima semana el expediente al tribunal de apelación, «y no existe un plazo límite para que ese tribunal se expida».
