Un gobernador del estado brasileño está pidiendo al presidente que envíe tropas a una región donde han estallado decenas de ataques incendiarios después de que las autoridades bloquearon el servicio de telefonía celular en una prisión.
El gobernador de Rio Grande do Norte, Robinson Farias, dijo que 51 personas han sido detenidas, la mayoría por arrojar bombas incendiarias para iniciar incendios en edificios públicos o autobuses. Las autoridades no han informado de ninguna muerte o lesiones.
Farias afirmó que los ataques son en represalia luego de que las autoridades bloquearon el servicio de telefonía celular en una cárcel del estado para evitar que los internos cometan delitos dando órdenes tras las rejas.
El gobernador dijo el domingo que la policía necesita ayuda para garantizar la seguridad a raíz de los ataques.