Cualquiera que quiera olvidarse del mundo que lo rodea ya tiene acceso a audífonos de tecnología avanzada que pueden amortiguar los sonidos. Los audífonos antirruido cuestan varios cientos de dólares, pero son una bendición para muchos viajeros hartos del barullo de la vida cotidiana.
Claro que hay ciertas desventajas: puede ser peligroso renunciar a nuestros sentidos. Los audífonos de la actualidad son tan buenos que nos arriesgamos a perdernos ruidos críticos, como alguien que grita tu nombre, la bocina de un auto o el grito de una persona pidiendo ayuda.
Por ejemplo: se podría programar los audífonos antirruido para escuchar si alguien grita su nombre.
Siempre voy caminando detrás de algún estudiante que va escuchando música; un amigo suyo sale de la biblioteca al otro lado de la plaza y trata de llamar su atención y ni se entera, dijo Peter Swendsen, profesor de Música Cibernética y Artes Digitales en la Universidad de Oberlin, en Estados Unidos.
Las ventas de audífonos en Estados Unidos generarán 2.200 millones de dólares en 2016, según la Asociación de Tecnología para el Consumidor de Estados Unidos.
Los audífonos antirruido emiten un sonido para cancelar el ruido ambiental que llega al oído de una persona con el fin de que no los distraiga. En la patente de Amazon se describe un sistema computarizado que detectaría ciertas frases clave y pausará temporalmente la cancelación de ruido al detectar esos sonidos.
Swendsen dijo que esos audífonos que permiten que se escuchen ciertas palabras seleccionadas podrían ser útiles para la seguridad pública y personal.
Una persona podría escuchar algo de inmediato en vez de 10 o 20 segundos después, en vez de darse cuenta de que todas las personas que te rodean están comenzando a reaccionar, sin tener idea de qué está pasando, dijo Swendsen.
