La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton atacó el plan económico de su rival republicano Donald Trump, al que describió como caridad para los ricos y un peligro para la economía.
Clinton, que frecuentemente habla de sus numerosos planes de políticas, no ofreció ideas nuevas para mejorar la economía del país en su discurso de la tarde en una fábrica en Michigan. En lugar de ello, contrastó su visión más optimista de la economía del país con lo que calificó como «las ideas estrafalarias de Trump«, que han sido rechazadas por ambos partidos.
«Basados en lo que sabemos de la campaña de Trump, él quiere que los Estados Unidos trabajen para él y sus amigos, a expensas del resto de la gente», dijo en una planta de Futuramic Tool & Engineering, en Warren, Michigan.
Presentándose en un condado conocido por los llamados demócratas de Reagan demócratas de clase trabajadora que votaron por los republicanos en los ochenta Clinton trató de aprovechar la oportunidad para ganar el respaldo de algunos votantes de clase trabajadora que han respaldado a su rival, argumentando que ella ofrece un mejor camino hacia el desarrollo económico y la prosperidad.
«Yo puedo proveer un liderato serio, firme, que pueda encontrar posiciones comunes y fortalecerlas sobre la base de negociaciones arduas, pero respetuosas», dijo. «No pienso que insultos e intimidaciones sean la forma de conseguirlo».
Reiteró una fuerte oposición al Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), dejándose poco espacio para retractarse si gana la Casa Blanca y el Congreso lo considera a finales del año.
«Yo me opongo ahora, me opondré tras las elecciones y me opondré como presidenta», dijo, al tiempo que recalcó que los Estados Unidos no pueden aislarse del resto del mundo.
Clinton una vez llamó el «estándar de oro» de los acuerdos comerciales cuando era secretaria de Estado, pero anunció su oposición al acuerdo el año pasado, y dijo que no satisfacía sus criterios para creación de empleos, mejorar salarios y protección de la seguridad nacional.
Eric Hernández, un operador de grúas de 45 años, dijo que había estado indeciso sobre Clinton, pero que el discurso lo impresionó.
«La forma realista que usó hoy me gustó de verdad», dijo «Si implementa las cosas que dijo, yo estaría extasiado».
Clinton planea además dar a conocer sus declaraciones de impuestos del 2015, en momentos en que busca mantener presión sobre Trump, que no ha proveído las suyas. Trump dijo que no las proveerá hasta que se complete una auditoría de las autoridades fiscales.
Clinton ha propuesto un gran proyecto de obras públicas, derogar exenciones impositivas para empresas que envían empleos al exterior y no aumentar los impuestos que paga la clase media. Ha prometido más dinero para la educación, un sueldo mínimo federal más alto y apoyo a la pequeña empresa.
Los dos candidatos eligieron un estado arduamente disputado como Michigan y más precisamente la zona de Detroit para presentar sus planes económicos. El antiguo centro fabril ha sufrido los embates de la decadencia de la industria automotriz y el mercado inmobiliario.