Desde hace más de 45 años, en Las Américas I, la familia Pérez Lindo rinde homenaje a la Concepción de María recibiendo en su hogar a los devotos de la Inmaculada cada 07 de diciembre, durante la celebración de La Gritería.
«Esta tradición la llevamos por más de 45 años desde que mi abuelo Ramiro Pérez, que en paz descanse, se encontró la Virgen de la Concepción en un costalito procedente a eso se la trajo a mi abuela Teresa Lindo, que también en paz descanse, desde ese momento la Virgen se empezó a gritar«, manifestó Chelibeth Garzón Pérez, miembro de la familia.
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«En aquel entonces la ofrenda que se daba eran cajetas, roscas bañadas, polvorones, cositas así hasta el día de hoy nosotros les dábamos panas, provisiones, arroz, azúcar», expresó Pérez.
Este lunes concluyeron el novenario para empezar a recibir a los grupos de familia después del grito que se realiza a las 6 de la tarde.
Foto: La Gritería, devoción cultivada de generación en generación /TN8
«Para nosotros sobre todo como católicos que somos, es algo muy especial ya que la Virgen a todos nosotros como familia le hemos pedido milagro. En nuestro altar tenemos varias vírgenes de distintos tamaños, cada virgen tiene un dueño en esta familia y representa un milagro que nos ha realizado distintas peticiones que hemos hecho», expresó la joven.
Esta es una fiesta religiosa que une con amor a cada uno de los miembros de esta familia que se organiza cada año para poder celebrar a La Purísima.
Fiesta religiosa
«Nosotros cuando ya vamos a mitad de año toda la familia nos empezamos a poner de acuerdo, desde hijos, sus nietos y a veces personas cercanas a la familia nos traen ofrendas. Nosotros la familia nos empezamos a coordinar con respecto al altar, preparando con las cortinas, las luces y cada quien va haciendo su aporte», afirmó la nieta del matrimonio que inició la tradición.
