XI'AN, 11 feb (Xinhua) — Alrededor de las 18:00 hora local de hoy, Wang Qi puso sus pies en su patria de nuevo en Xi'an, capital de la provincia de Shaanxi, noroeste de China, después de pasar 54 años en una vida a la deriva en la India.
"¡Finalmente estoy en casa!", dijo Wang en sollozos abrazado por sus hermanos y hermanas que lloraban en el Aeropuerto Internacional Xianyang de Xi'an.
Wang, un soldado chino, se perdió en un bosque en la frontera China-la India en 1963. Fue rescatado por la Sociedad de la Cruz Roja de la India y luego fue entregado al ejército indio. El ejército lo sentenció a siete años de cárcel después de considerarlo un "espía".
Wang se asentó y casó en un área rural de la India después de cumplir su sentencia, pero siempre deseó regresar a casa. Durante los últimos años, Wang envió muchas cartas a los miembros de su familia en la aldea Xuezhainan, del distrito Qianxian, en Shaanxi, y expresaba su nostalgia y deseo de regresar.
Para ayudar a Wang a regresar a casa, la embajada china en la India hizo todos los esfuerzos para conseguirle un permiso de salida. En 2013, recibió un pasaporte chino y apoyo financiero del gobierno, lo que hizo posible que regresara.
En la aldea natal de Wang, un grupo de personas se alineó afuera de la casa del hermano menor de Wang, Wang Shun, hoy, que resulta es al celebración de La Fiesta de las Linternas de China, un día que normalmente representa reunión.
"Después de todos estos años, finalmente regresa", dijo Wang Shun mientras preparaba un edredón para Wang Qi. "Compramos los muebles de esta habitación hace muchos años".
"El no ha cambiado mucho, todavía puedo reconocerlo", dijo un aldeano local, Wang Ming. "Todos en la aldea hemos estado esperando su regreso, y estamos muy felices de que lo haya logrado". Fin