Al menos 10 policías y la esposa de un comandante policial fueron asesinados en una emboscada por milicianos del grupo extremista Estado Islámico en la provincia de Zawzjan, en el norte de Afganistán, informó el sábado un funcionario.
Los agentes fueron atacados el viernes a la salida de una mezquita, explicó Mohammad Reza Ghafori, portavoz del gobernador de la región de Zawzjan. La esposa del comandante de la policía escuchó que su esposo había sido baleado y corrió hacia el lugar de los hechos, donde también fue asesinada.
Los extremistas vinculados al Estado Islámico han sido muy activos en las regiones orientales de Afganistán, pero recientemente comenzaron a operar también en el norte del país.
Por otra parte, el Ministerio del Interior informó en un comunicado que alrededor de 38 insurgentes, entre ellos 23 miembros del grupo Estado Islámico, fueron muertos en operaciones separadas de las fuerzas de seguridad afganas en el este y sur del país en los dos últimos días.
Otros ocho milicianos resultaron heridos y seis fueron detenidos en los operativos realizados en las provincias de Nangarhar, en el este, y de Helmand, en el sur, agregó la nota.
Según otro reporte desde la provincia oriental de Laghman, dos estudiantes fallecieron por un ataque con mortero contra el aula de una escuela, dijo el Ministerio de Educación. Otros cinco estudiantes resultaron heridos en el interior del salón, en Mihterlam, la capital de la provincia, agregó el texto.
No estuvo claro quién disparó el mortero, pero de acuerdo con informaciones no confirmadas, fueron las fuerzas afganas de seguridad debido a un error, pues no alcanzaron su objetivo original. El reporte no pudo ser confirmado de inmediato por funcionarios provinciales ni del gobierno.