El número de casos de zika, dengue y chikungunya denunciados en las primeras seis semanas y media del año en Brasil es casi 90% menor que en el mismo período del año pasado, informó el Ministerio de Salud el miércoles.
Entre el 1 de enero y el 18 de febrero se registraron 60.124 casos de las tres enfermedades, comparado con 549.510 casos un año antes, detalló el ministerio en un correo electrónico.
La agencia atribuyó la caída a la campaña para erradicar el mosquito Aedes aegypti, transmisor de las tres enfermedades y de la fiebre amarilla. El mosquito se ha adaptado a la vida entre los seres humanos, vive en las casas y puede poner huevos hasta en una tapa de botella llena de agua estancada.
Brasil también está enfrentando un brote de fiebre amarilla. El Departamento de Salud de Río de Janeiro ya confirmó los primeros dos casos de la enfermedad en el estado. Indicó que uno de los pacientes murió y el otro está hospitalizado.
Más de 370 casos de fiebre amarilla han sido confirmados desde el inicio de este brote, indicó el Ministerio de Salud. De esos, más de 130 han fallecido.
Incluso antes de que se confirmara el primer caso, el Departamento de Salud de Río anunció que planeaba vacunar a toda la población del estado como medida de preocupación. El estado indicó que necesitará 12 millones de dosis para alcanzar una tasa de vacunación de 90% para finales del año.
