Una sonrisa es la bienvenida, el menú fue diseñado a base de pictogramas y los pedidos se recibe mediante señas, bienvenidos al Café de las Sonrisas, un espacio en el que el personal que atiende son sordos.
El Café de las Sonrisas abrió sus puertas en 2012, no es una cafetería común, sino la primera en Latinoamérica en la que su personal se comunica mediante el lenguaje de señas, son 7 jóvenes sordos habitantes de Granada que colaboran en esta peculiar cafetería.
“La idea era muy bonita, yo quería un café en el que las personas pudieran venir y no necesitaran un oyente para que interpretara su orden, quería un proyecto radical, tampoco queríamos que esto fuera una experiencia, tenia que ser un cafetín como cualquier otro, si usted quiere volver es porque le gusto la comida” compartió Antonio Prieto conocido como el Tío Antonio, coordinador de la iniciativa.
Colaborar en esta cafetería les ha cambiado la vida y nos brinda a los clientes la oportunidad de romper la barreras de la comunicación para disfrutar de los deliciosos platillos que se ofertan en el Café de las Sonrisas.
“La inicio me daba miedo, porque no sabia nada, ni cocinar, pero el Tío Antonio me ayudó y aprendí, me daba pena porque no escucho ni hablo, pero logre superarlo y me comunico muy bien con los clientes” nos compartió Irma Urbina, mediante lenguaje de señas.
“Yo soy el encargado de llevar las cuentas del café y dar las gracias a los clientes, ya llevo 5 años en el Café de las Sonrisa y eso me hace sentir bien” dijo Rodolfo Sánchez, mediante lenguaje de señas
La idea nació de Antonio Prieto, conocido como el Tío Antonio un Español que llego a Nicaragua y la convirtió en su hogar de residencia, tras un tiempo en el país, se dio cuenta que encontrar trabajo para las personas con discapacidad es muy complicado, fue así que inicio su primer proyecto realizar hamacas y emplear a jóvenes, ciegos y sordos.
Sus sueños los llevaron a realizar la hamaca papal, así es!!!, una hamaca para el Papa Francisco, quien al recibirla en 2013 envió una carta de agradecimiento a través del nuncio apostólico Fortunatus Nwachukwu.
¨Hoy tenemos el orgullo de enviar hamacas a todas partes del mundo, tuvimos nuestro momento de gloria confeccionamos la hamaca para el Papa Francisco” afirmó Tío Antonio, coordinador de la iniciativa.
Con la apertura en Nicaragua el Café de las Sonrisas, hizo eco en otros país, ahora Colombia y México cuentan con cafeterías similares con formato inclusivo.
Con la iniciativa del Tío Antonio se le brinda la oportunidad de emplearse a 7 jóvenes sordos en la cafetería y a 12 sordos y ciegos en el taller de hamacas… para quienes desean conocer mas de esta iniciativa, ya sea para adquirir una hamaca o disfrutar del delicioso menú del Café de las Sonrisas pueden visitarlos de la iglesia de la Merced media al este en Granada.