En medio de varias personas humildes, el jerarca recalcó que "todos nosotros somos pecadores" y llamó a la restauración de los corazones.
La Iglesia Católica "necesita ser restaurada" porque está conformada por "todos nosotros", es decir, por "pecadores", expresó este sábado el papa Francisco en un breve mensaje que dirigió a los habitantes de un barrio periférico de Milán (norte de Italia).
"La Iglesia necesita siempre ser restaurada porque está hecha de todos nosotros, que somos pecadores. Dejémonos restaurar por Dios, por su misericordia. Dejémonos limpiar nuestro corazón", llamó el pontífice.
El exhorto estuvo precedido por un obsequio por parte de la ciudad: un ícono de la Virgen, la cual fue reparada recientemente, lo cual dio pie para el fragmento de su sermón: "Es significativo el que haya sido restaurada: esta Virgen ha sido restaurada, como la Iglesia tiene siempre necesidad de ser restaurada".
Francisco llegó a las 08H00 hora local (07H00 GMT) al aeropuerto de Milán-Linate, donde fue recibido por el cardenal Angelo Scola, arzobispo de la ciudad, por el presidente de la región Lombardía, Roberto Maroni y por el alcalde, Giuseppe Sala.
Como parte de su itinerario, el Papa se dirigió a Forlanini, una zona conocida como las "Casas Blancas" y con problemas de marginación, donde el argentino se pronunció en favor de la restauración de la Iglesia.
Como es su costumbre en sus viajes pastorales, Francisco dedica buena parte de su jornada a visitar sectores desfavorecidos y a conversar con la gente más humilde.