El ciclón Debbie perdió hoy fuerza tras causar miles de evacuados, y daños en infraestructuras y viviendas con fuertes lluvias y ráfagas de viento de más de 260 kilómetros por hora en el noreste de Australia.
El ciclón, cuya categoría fue reducida de 4 a 2 -de un máximo de 5-, ha causado al menos un herido, y ha derribado árboles y postes del tendido eléctrico a su paso por el estado de Queensland, informa la cadena ABC.
Con vientos sostenidos de 120 kilómetros por hora y copiosas lluvias, el Debbie continúa presentando un riesgo para los residentes del estado, donde unas 40.000 personas y 400 centros educativos se han quedado sin electricidad.
La jefa del Gobierno de Queensland, Annastacia Palaszczuk, dijo que mañana a primera hora los servicios de emergencia calcularán el "daño estructural", principalmente en las localidades costeras como Proserpine.
Palaszczuk advirtió de los peligros a que se exponen algunos residentes que han desafiado el temporal para conducir sus vehículos e incluso hacer surf, lo que ha calificado de "irresponsable".
Algunos lugareños han relatado a la prensa local los efectos del el ciclón.
"El tejado del vecino ha sido arrancado parcialmente y ha roto tres ventanas de mi casa", señaló Sue, una vecina de la localidad de Proserpine.
"Puedo escuchar los árboles arrancados. Da miedo. (…) si estamos a la mitad, cuando haya pasado (el ciclón) por completo será devastador", expresó otra vecina.
Las autoridades estiman que el Debbie pasará a la categoría 1 a partir de la madrugada de mañana y avanzará hacia el interior del país, donde se temen inundaciones entre Collinsvile y Mount Coolon, ambas localidades en Queensland.
Las autoridades consideran que el Debbie habrá sido el ciclón más potente en afectar Australia desde el Yasi, que en 2011 generó un oleaje que causó numerosos daños en el litoral.