La situación de los cientos de miles de desapariciones forzadas en México es "aberrante", sostuvo hoy la activista Lucía Díaz, quien busca a su hijo desaparecido el 28 de junio de 2013 en Veracruz.
Díaz, acompañada de otras seis activistas de su país, se encuentra de visita en la capital guatemalteca para recibir un curso sobre identificación de desaparecidos en la Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG).
"La situación de las desapariciones en México es aberrante, nos quedaremos estupefactos cuando conozcamos la cifra real", manifestó la actividad del Colectivo Solicito de Veracruz.
En declaraciones a Acan-Efe, Díaz dijo que busca desde junio de 2013 a su hijo Luis Guillermo Lagunes, quien fue secuestrado y hasta ahora desconoce su paradero.
Explicó que la visita a Guatemala es para recibir un entrenamiento sobre el uso de la antropología para la identificación de desaparecidos.
Consideró que la FAFG es una institución "sólida y de prestigio" dirigida por científicos, y que desearían una fundación similar en México para identificar las osamentas de los desaparecidos que sean localizados.
Díaz aseguró que en Veracruz "ocurren violaciones sistemáticas y continuas, sobre todo contra los jóvenes" y advirtió que el futuro de México "está empañado por la corrupción".
Agregó que en su país es "impostergable" la aprobación de una ley que permita la búsqueda de los cientos de desaparecidos, y que al exgobernador de Veracruz Javier Duarte, detenido el pasado 15 de abril en Guatemala con fines de extradición por corrupción, también se le deben imputar delitos de desapariciones y no solo de mexicanos sino también de inmigrantes.
Por su parte, Yadira González, de un colectivo de Querétaro (México) que busca a su hermano Juan desaparecido en 2006, sostuvo que "todo México, por desgracia, es una fosa común de desaparecidos".
Solo en Veracruz se estiman en 30.000 las desapariciones forzadas desde 2006 a la fecha.