Caitlyn Jenner se abrió el lunes sobre su nuevo libro de memorias y habló de su transición y de los obstáculos en el camino, incluyendo tres matrimonios fracasados, pensamientos suicidas ante la persecución de los paparazzi y la libertad de su verdadero ser.
Y sí, contrario a la idea de muchos en la comunidad trans, usa su antiguo nombre, Bruce, en el libro "The Secrets of My Life", a la venta esta semana. También describe su liberadora cirugía de reasignación de género — "La Cirugía Final", como la llama — en la última página, e insiste en que es lo último que dirá al respecto.
Aborda brevemente sus ideas políticas conservadoras en torno al presidente Donald Trump y otros asuntos relacionados, pero no habla mucho de temas importantes para la comunidad LGBTQ en general como el matrimonio entre personas del mismo sexo.
"Sí, he sido criticada porque vengo de un lado republicano más conservador, pero mi lealtad no está con el Partido Republicano, mi lealtad no está con Donald Trump. No soy votante de un asunto. Creo en un gobierno limitado. Me gustan los impuestos más bajos. Me gusta una economía boyante. Me gusta que todo el mundo trabaje, pero mi lealtad está con mi comunidad y con hacerla mejor", dijo Jenner. "El Partido Republicano me ha decepcionado mucho a lo largo de los años".
¿Por qué visitar esos sitios para empezar meses después de revelar formalmente su transición en una entrevista con Diane Sawyer vista por 17,1 millones de televidentes, aparecer en la portada de Vanity Fair y tener un reality show en Bravo, el ahora cancelado "I Am Cait", en el que salió al ruedo con otros miembros de la comunidad trans?
"Necesitaba sacarlo todo de mi corazón", dijo Jenner, de 67 años, en una entrevista con The Associated Press sobre su libro. "Lo que traté de lograr es, primero, sacar todo lo que tenía adentro por mí, para que no hubieran más secretos; segundo, fue el modo en el que lidié con mis asuntos".
Coescrito por Buzz Bissinger (quien escribió la historia en Vanity Fair), el libro ya le ha sacado lágrimas a la tercera esposa de Jenner, Kris Jenner, cuyo clóset Caitlyn solía asaltar mientras luchaba con su identidad de género. Son momentos, dijo Caitlyn, de los que Kris estaba consciente antes "de que le hiciera el amor" tras haberse conocido en 1990.
"Para ser honesta ni siquiera he hablado con ella al respecto", dijo Jenner de la reacción de Kris al libro.
Hubo muchos momentos oscuros para el medallista olímpico mientras éste escondía sus luchas de género, incluido su infructuoso intento por transicionar en los años 80.
Jenner tomó hormonas y entonces se echó para atrás, pero sus pechos aumentados no se redujeron al parar el tratamiento y debió someterse a una liposucción mientras continuaba viviendo como un hombre.
Hubo un momento en particular, años después, que llevó a Jenner al más oscuro de los lugares: el suicidio. El cibersitio de farándula TMZ distribuyó una foto de un desaliñado Jenner saliendo de un consultorio médico tras un procedimiento para reducirse la tráquea y lucier más como una mujer. Esto fue antes de Diane Sawyer y su salida formal, y lo sintió como una salida dolorosa y forzada.
"Llegué al punto que pensé, sabes qué, conozco una salida fácil", dijo Jenner. "Tenía una pistola en la casa. … Pero al día siguiente pensé, ¿no sería eso lo más estúpido que haya hecho, silenciar mi voz? Tengo la oportunidad de realmente hacer una diferencia, de vivir con honestidad".
Jenner ha pasado gran parte de los últimos dos años aprendiendo de la comunidad trans desde la perspectiva privilegiada de una persona blanca y adinerada, lo que reconoce a cabalidad en el libro. Trata de reparar daños con su extensa familia, que incluye a sus seis hijos y sus cuatro hijastros Kardashian.
Pero dos miembros de la familia, el hermano menor de Jenner que murió años atrás en un accidente automovilístico y su difunto padre, jamás conocerán sus secretos.
"Él fue un buen hombre. Éramos muy cercanos", dijo de su progenitor. "Estaba muy orgulloso de Bruce y de las cosas que logré en mi vida, en especial de los Juegos (Olímpicos) y todo eso. … Creo que hubiese sido muy difícil para él, al igual que sería muy difícil para mí".
Jenner les dedica el libro, publicado por Grand Central Publishing, a su padre y a su hermano. En cuando a que su papá no lo hubiera entendido, está bien, dijo.
"Alguien me preguntó el otro día, ¿qué pasaría si Kendall viniera a ti y te dijera que es trans y que quiere transicionar a un hombre? Y yo dije ahhhh, mi angelito, tú sabes, mi niñita adorable. Es difícil para un padre. Lo entiendo", dijo Jenner en referencia a su hija, la modelo Kendall Jenner.
La vida es buena en este momento. Mejor que buena, dijo Jenner, aunque está deseosa de que llegue el momento en que no piense todos los días en su género.
"Me siento extraordinariamente cómoda conmigo misma", expresó. "Pero aún no termino de llegar ahí. … Mi vida es muy simple ahora. Me levanto, soy yo misma, me alisto, salgo, hago mis cosas. Estoy muy motivada así que, sí, todo está bien".