Cuerpos de Seguridad de Honduras trasladaron hoy desde el presidio de San Pedro Sula, norte, a unos 378 reos de alta peligrosidad a una cárcel de máxima seguridad conocida como "El Pozo", en el occidente del país, atendiendo instrucciones del presidente Juan Orlando Hernández.
El gobernante hondureño confirmó el traslado de los reclusos mediante la "Operación Arpía II" a través de un mensaje en la red social Twitter.
"Operación ARPÍA II en curso desde tempranas horas de la madrugada. Seguimos con traslados de privados de libertad del centro penal de SPS" (San Pedro Sula), indicó Hernández.
En la operación, bajo la coordinación de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (FUSINA) han participado policías, militares y efectivos de la Fuerza Aérea, entre otros cuerpos para garantizar la seguridad del traslado.
La cárcel de máxima seguridad "El Pozo" se localiza en el municipio de Ilama, departamento occidental de Santa Bárbara, hacia la que entre marzo y abril fueron enviados la mayor parte de 1.133 presidiarios, en su mayoría miembros de pandillas, que fueron remitidos a otros centros penales desde San Pedro Sula.
Una fuente de la FUSINA en San Pedro Sula dijo a periodistas que entre los reos enviados hoy a "El Pozo" figuran varios extranjeros de Colombia, El Salvador, Guatemala y Panamá, de los que no precisó detalles.
El traslado de más de 1.000 reos a El Pozo representa un alivio para el presidio de San Pedro Sula, que fue construido para 800 reos, pero su población llegó a superar los 3.200.
El Gobierno hondureño impulsa un proyecto de reforma de los centros penales, lo que incluye nuevas cárceles y el cierre definitivo de la de San Pedro Sula, que está situada en una zona céntrica de la ciudad.