Después de abandonar por más de dos años el segmento de wearables, Microsoft podría estar a punto de volver a las andadas, aunque no con el sucesor de la Band 2.
Un nuevo reporte de The Inquirer asegura que la compañía estaría trabajando con un socio para lanzar un dispositivo dirigido a los negocios.
Con un enfoque B2B (Business to Business, o entre negocios), el objetivo de Microsoft sería el de lanzar un reloj inteligente con Windows 10 capaz de ejecutar aplicaciones universales completas del sistema operativo.
De este modo, podrías tener en la muñeca cientos de programas. Sin embargo, la idea de Microsoft no es que puedas responder a Twitter o ver tus fotos de Instagram, la empresa quiere que el dispositivo ejecute Windows 10 Core y que esté dirigido a ayudar a las empresas.
Según CNET, entre las cualidades del dispositivo se encuentra la posibilidad de ayudar con la gestión del inventario minorista, la automatización de servicio al cliente o la gestión de flotas, todo desde tu muñeca.
TrekStor sería, según la fuente, la empresa que actualmente está encargada del desarrollo. Entre las características que se conocen se encuentra la de su pantalla que sería de 1.54 pulgadas, así como conectividad Wi-Fi y Bluetooth. Además el dispositivo tendría mucho almacenamiento, la potencia necesaria para ejecutar los apps y mucha batería.
El anuncio al que tuvo acceso la fuente, asegura que "TrekStor IoT Wearable permitirá que varias funciones sean reportadas al lugar correcto sin ningún desvío comunicativo, y los mensajes pueden ser transmitidos en silencio en tiempo real o verbalmente a través de mensajes de voz".
Y aunque no está demasiado claro si los wearables van a triunfar tanto como se ha predicho hasta ahora, Microsoft y TrekStor parecen apostar por el lanzamiento del dispositivo para un mercado nada convencional, y en el que este tipo de novedades pueden resultar de interés.
En el pasado también se habló de que las Google Glass, que hasta ahora no han salido a la venta masivamente, estarían siendo rediseñadas para reorientarlas al segmento corporativo, en donde podrían tener una mejora acogida.