LeBron James marcó el compás con 30 puntos y los Cavaliers de Cleveland le pasaron la aplanadora el viernes a los Celtics de Boston con una victoria 130-86 que les dejó arriba 2-0 en la final de la Conferencia del Este.
Kevin Love añadió 21 puntos con 12 rebotes para los Cavs, que igualaron un récord de la NBA con su 13ra victoria seguida en los playoffs.
Cleveland lideró por 14 puntos tras un cuarto, por una cifra récord de 41 al descanso y por 46 tras tres periodos. Aun cuando James y los otros titulares se pasaron el último cuarto en el banco, los 130 puntos constituyeron la mayor cantidad anotar por la franquicia en un partido de postemporada.
Kyrie Irving aportó 23 puntos para los Cavs, ahora rumbo a casa con la oportunidad de liquidar a los Celtics en Cleveland. Sería la tercera barrida seguida esta postemporada de los vigentes campeones de la NBA, que también ganaron los últimos tres partidos de la serie final el año pasado frente a los Warriors de Golden State.
El tercer duelo será la noche del domingo.
Los Celtics disputaron el segundo tiempo sin su base Isaiah Thomas debido a una dolencia en la cadera derecha. Pero el partido ya se les había escapado de las manos para entonces.
Con ambos equipos recurriendo a los suplentes al iniciar el cuarto periodo, el único suspenso era si los Celtics iban a evitar su peor derrota en los playoffs. El Magic de Orland les venció por 47 puntos en la primera ronda de la postemporada de 1995.
De todas formas, fue la peor derrota en casa de los Celtics en los playoffs.
Thomas solo pudo embocar un par de tiros libres y falló todos sus seis disparos de campo. El novato Jaylen Brown anotó 19 para Boston, Avery Bradley registró 13 y el dominicano Al Horford sumó 11 puntos con cinco rebotes.
El partido arrancó 15 minutos después que se anunciara el trío de finalista por el Jugador Más Valioso de la NBA, y James brilló por su ausencia dentro del grupo. Se trata de la primera vez desde 2008 que James no figura dentro de los tres primeros.
Pero James, cuatro veces el Más Valioso de la liga, busca un cuarto campeonato de la NBA y segundo seguido.
Quizás Golden State pueda encontrar la forma de frenarle, o San Antonio, si es que puede reflotar en la final del Oeste. Los Celtics no tienen respuestas y el tiempo se les agota.