La figura y capitán del Real Madrid de España Sergio Ramos, mostró su lado humano al referirse sobre las muertes fatídicas que dejó el juego de gran final entre Motagua y Honduras Progreso.
El defensor central de la selección española lamentó, por medio de sus cuentas sociales, el deceso de cuatro personas que fallecieron durante una avalancha de público que intentaba ingresar al coloso capitalino.
“Conmocionado con otra tragedia alrededor del fútbol. Mis pensamientos con las víctimas de #Honduras./ My thoughts are with the victims”, escribe Ramos en su cuenta @SergioRamos.
Las personas murieron producto de asfixias luego que una muchedumbre de personas que se encontraba aún fuera del estadio intentaran entrar sofocadamente al sitio para disfrutar del juego.
Niños, adultos e inclusive una persona en estado de embarazo resultaron severamente lesionadas. Todos fueron enviados de inmediato al Hospital Escuela Universitario.
Al menos cuatro muertos, centenares de personas heridas, menores de edad perdidos, aficionados mojados, golpeados fue parte de lo que se vivió este domingo en el Estadio Nacional de Honduras.
Los portones desde tempranas horas estuvieron cerrados y la cantidad de personas que dejaban ingresar era mínima. Al no poder sostener la “marea” de aficionados que pretendían entrar al estadio, los agentes policiales y militares comenzaron a reprimir a toda la gente, lo que dio inicio a la desgracia.
La policía desalojó a la multitud de las afueras del estadio con gases lacrimógenos, "lo que provocó una estampida de aficionados", añadió el portavoz del Hospital Escuela Universitario, Miguel Osorio.
"Las víctimas mortales inhalaron los gases, cayeron al suelo y fueron pateadas y pisoteadas por la gente que huía de la situación", indicó a AP Miguel Osorio.
Unos 600 agentes policiales enfrentaron dificultades para controlar a miles de aficionados enardecidos que intentaron entrar por la fuerza a presenciar el partido. Los desalojaron con chorros de agua y gases.
