MOGADISCIO, Somalia (AP) — Hombres armados que se hicieron pasar por miembros del ejército tenían como rehenes a un número indeterminado de personas dentro de un popular restaurante de la capital de Somalia, en un ataque que comenzó cuando un coche bomba explotó en la puerta, dijeron la noche del miércoles la policía y testigos.
El grupo extremista al-Shabab se atribuyó la responsabilidad del acto en el que murieron al menos 17 personas, algunas de ellas extranjeras, según cifras de la policía y un conductor de ambulancia.
Dos de los atacantes murieron por disparos y fueron rescatados 10 rehenes, pero se cree que otros cinco atacantes permanecen en el interior, donde cortaron el suministro de electricidad para complicar los esfuerzos de las fuerzas de seguridad para dar fin a la situación, dijo el capitán Mohamed Hussein, quien agregó que se escuchaban disparos.
Lluvias dejan 12 muertos en este de la India
Un conductor de ambulancia del servicio Amin Ambulance, Khalif Dahir, dijo el jueves que llevó 17 cuerpos y a 26 personas heridas. La policía dijo que entre los muertos había un hombre de Siria. La mayoría de las víctimas eran hombres jóvenes que estaban entrando a Pizza House cuando explotó el vehículo, dijo Hussein.
Los hombres armados “vestían uniformes militares. Obligaron a las personas que huían a entrar en el restaurante”, dijo el testigo Nur Yasin a The Associated Press.
El estallido destruyó la mayor parte de la fachada del restaurante y ocasionó un incendio. Aunque al-Shabab aseveró que había atacado el vecino restaurante Posh Treats, que es frecuentado por la élite de la ciudad y que resultó dañado en la explosión, funcionarios de seguridad dijeron que el objetivo del ataque fue Pizza House.
Fuerzas de seguridad rescataron a asiáticos, etíopes, kenianos y a otros trabajadores en Posh Treats mientras el ataque continuaba, dijo Hussein.
Al-Shabab, afincado en Somalia, con frecuencia ataca áreas muy conocidas en Mogadiscio, incluidos hoteles, retenes militares y zonas cercanas al palacio presidencial. El grupo extremista juró intensificar los ataques después que el gobierno elegido recientemente lanzó una nueva ofensiva militar en su contra.
