Elvis es un pescador artesanal y el año pasado sufrió un accidente en lancha. Los doctores en ese entonces lo intervinieron quirúrgicamente, ameritó 8 puntadas en el hombro derecho.
Con el pasar del tiempo fuertes dolores lo atormentaban y no lo dejaban dormir, al perturbar el sueño tambien comenzaron problemas de peso y en la espalda.
Desde que un doctor en medicina interna lo remitió a la clínica de medicina natural en el centro de salud de Altagracia, en el Distrito III de Managua, su vida le ha cambaido.
Sus dolores han disminuido y ahora se siente con más ánimo y fuerza para seguir trabajando.
Esa es la diferencia entre la medicina tradicional y convencional. En estos consultorios especializados llamados también clínicas verdes, se ofrecen terapias de relajación con tratamientos efectivos contra el dolor y sus repercusiones.
La doctora Zoila Canales, directora del Centro de Salud, explicó que aquí los pobladores de unos 17 barrios aledaños están tratando sus patología como lumbalgias, trastorno del sueño, neuralgias, dolor en las articulaciones y otros padecimientos.
Por su parte la doctora Belkis Mora, quien atiende en el consultorio, dijo que los problemas se tratan desde la raíz, lo que permite cambiar la calidad de vida de los pacientes.
"Nuestro cuerpo tiene mucha energía, lo que hacemos es tratar con diferentes terapias de relajación los problemas, sin duda hemos visto que esta rama de la medicina está cobrando mucho auge en Nicaragua", dijo la especialista.
Esta clínica atiende a diario a unas 40 personas y si es necesario serán trasladados a un experto en fisioterapia.
En Nicaragua los hospitales y centros de salud han habilitado esta especialidad con el fin de diversificar las atenciones.
Las clínicas brindan atención gratuita e inician a atender desde las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde.