MILÁN (AP) — La policía y los bomberos italianos recuperaron el sábado el octavo y último cadáver de entre los escombros de un edificio de apartamentos de cinco plantas que colapsó parcialmente en una ciudad costera al sur de Nápoles.
El trabajo de excavación en busca de víctimas terminó el sábado por la mañana, más de 24 horas después de que parte del edificio de viviendas se derrumbara de repente.
Casi 80 bomberos trabajaron junto con la policía y otros equipos durante la noche, con ayuda de excavadoras, taladros y a mano para localizar a las víctimas.
Los muertos fueron identificados como un residente de edad avanzada y dos familias, una con niños de primaria y secundaria y otra con un hijo adulto que vivía en su casa.
Las autoridades dijeron que la causa del colapso está bajo investigación, pero que podría estar vinculada con trabajos de renovación en el edificio, ubicado junto a la línea del tren entre Nápoles y Salerno, en la ciudad de Torre Annunziata.
Los escombros cayeron sobre los rieles, por lo que permaneció cerrada la línea escénica que conecta Nápoles con la cercana zona arqueológica de Pompeya y la pintoresca costa de Amalfi.
Los testigos dijeron que no hubo una explosión antes del derrumbe, pero que un tren acababa de pasar. El ferrocarril italiano aseguró que las vibraciones del tren no tienen ningún impacto en edificios adyacentes porque son absorbidos por la grava de las vías.
Los fiscales estaban investigando posibles cargos.
El cuerpo policial de los carabinieri fueron los primeros en responder al colapso a las 6:30 de la mañana, cuando muchos residentes seguían dormidos, y debieron cavar a mano para encontrar sobrevivientes.
El trabajo a mano continuó durante horas hasta que llegaron equipos pesados, mientras que perros de rastreo revisaron si había indicios de vida.
“Intervinimos de inmediato”, dijo el jefe de los carabinieri Marshall Francesco Murciano a Sky TG24. “Nos encontramos ante una escena escalofriante. Empezamos a cavar con nuestras manos, sin herramientas”.