El ex pelotero puertorriqueño Iván Rodríguez será exaltado mañana, domingo, al Salón de la Fama del Béisbol, como el "receptor más completo" que haya jugado sobre el terreno de juego, dijo a Efe el historiador deportivo Jossie Alvarado.
"No está mal decir que Iván es el receptor más completo en la historia y uno de los mejores receptores que ha dado las Grandes Ligas", aseguró Alvarado sobre la inclusión de Rodríguez a la llamada "meca del béisbol" en Cooperstown, Nueva York.
Junto a Rodríguez, otros dos ex peloteros serán exaltados mañana al "Salón de los Inmortales", Tim Raines y Jeff Bagwell, por los votos de la Asociación de Cronistas de Béisbol de América (BBWAA, por sus siglas en inglés).
Rodríguez, quien tendrá en su placa del Salón de la Fama la gorra de los Vigilantes de Texas, fue escogido el pasado 18 de enero con el 76 % -del mínimo de 75 %- de las votaciones de los cronistas.
De esta manera, se unirá a Roberto Clemente, Orlando "Peruchín" Cepeda y Roberto Alomar como los cuatro puertorriqueños en ingresar al Salón de la Fama.
"Para mí, el haber llegado al Salón de la Fama, convierte a Iván en uno de los más grandes automáticamente. Eso no debe haber discusión, porque aquí en Cooperstown están los más grandes", resaltó Alvarado.
En 21 temporadas en las Grandes Ligas, "Pudge" Rodríguez atizó en 2.543 partidos, promedio de bateo de .296, conectó 2.844 imparables, disparó 311 jonrones, impulsó 1.332 carreras, anotó 1.354 veces y terminó con 4.451 total de bases.
Entre algunas de estas estadísticas, como juegos jugados, imparables, dobles y total de bases, al igual que sus 13 Guantes de Oro, Rodríguez es el líder entre los receptores en todos los tiempos.
"Iván cambió el juego porque no se había visto un receptor en el béisbol que reúna todas las cualidades de un pelotero completo. Robó bases, bateó jonrones, bateó promedio y jugó defensa. Eso se llama dominio absoluto", destacó Alvarado.
Además, Rodríguez participó en 14 Juego de Estrellas, en 1999, con los Vigilantes, ganó el premio del Jugador Más Valioso (JMV) en la Liga Americana y en 2003, con los entonces Marlins de Florida, obtuvo el JMV de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
En ese mismo 2003, Rodríguez condujo a los Marlins ante los Yankees de Nueva York a ganar su segundo campeonato de la franquicia.
"Iván fue uno de los peloteros de mayor impacto en su era, por su destaque en la ofensiva y defensa, con su mente dentro del terreno del juego, como líder dentro del camerino, que lo hace uno de los mejores jugadores en su posición", resaltó Alvarado.
"Eso lo hace más exclusivo y denota grandeza", enfatizó Alvarado al comparar la carrera de Rodríguez con la de otros ex receptores también miembros del Salón de la Fama, pero que se destacaron más en la ofensiva, como Mike Piazza, Gary Carter o Carlton Fisk.
Alvarado dijo también que Rodríguez es uno de ocho receptores que han participado en al menos 100 juegos, remolcado y anotado mínimo 100 carreras en una temporada, pero que junto a Roy Campanella son los únicos dos que hayan ganado el premio del JMV en una misma campaña. Campanella lo hizo en el 1953 y Rodríguez en 1999.
El historiador boricua resaltó también a Rodríguez por jugar en "la posición más difícil" del béisbol, pues los receptores tienen que mantenerse doblados por gran parte del juego para recibir los tiros de los lanzadores y luego prepararse para batear.
"Eso es algo que debe sacarse aparte al momento de evaluar a un jugador. Por esa parte es que Iván se sale de los grupos en que está", subrayó Alvarado del boricua, quien previo a hacer su debut en Grandes Ligas en el año 1991, Rodríguez jugó con los Criollos de Caguas en la Liga invernal de Puerto Rico en la temporada 1989-90.
En total, fueron nueve las campañas que el reconocido jugador defendió los colores del equipo cagüeño.