El canciller guatemalteco, Carlos Raúl Morales, insistió hoy en que a pesar de los problemas de seguridad que enfrenta su país, la principal amenaza de las pandillas está en El Salvador y Honduras.
“No significa que no tengamos problemas de seguridad, por supuesto, (pero) nada comparado con los problemas que tienen El Salvador y Honduras, donde la amenaza de las maras es realmente latente y preocupante”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores, quien añadió que la situación más complicada está en El Salvador.
Morales respondió así al ser cuestionado sobre la decisión del Gobierno de Estados Unidos de deportar a varios inmigrantes ilegales, a los que acusó de ser parte de la Mara Salvatrucha y otros grupos violentos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró la semana pasada que el Gobierno pretende “desmantelar, diezmar y erradicar” a organizaciones violentas como la MS-13, cuya formación atribuyó a la inmigración ilegal permitida por pasadas administraciones.
El mandatario prometió imponer la ley, proteger las fronteras del país y apoyar a las fuerzas del orden, a quienes animó a no ser “demasiado agradables” en el momento del arresto de sospechosos, concretamente a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), constató Prensa Libre.
El canciller de Guatemala recordó hoy que nueve de cada 10 guatemaltecos migran por razones económicas y no de seguridad, y reiteró que el principal reto de su país para frenar la inmigración irregular es crear desarrollo y combatir la desnutrición y la pobreza, porque “el hambre y la necesidad” es fuerte y no se termina con campañas.
El Triángulo Norte de Centroamérica, formado por Guatemala, El Salvador y Honduras, es una de las zonas más violentas y empobrecidas del mundo con un fuerte flujo migratorio hacia Estados Unidos y México, por lo que se puso en marcha el Plan Alianza para la Prosperidad, en colaboración con ese país norteamericano.