En los últimos días en el municipio de Wiwilí, en Jinotega, se han registrado terribles homicidios y asesinatos, uno de ellos es el hallazgo del señor Exequiel Rayos Orozco de 35 años de edad, quien fue encontrado con dos disparos de un revólver .38 y un certero hachazo en su mandíbula, dejándolo sin vida instantáneamente.
Este terrible hecho ocurrió en la comunidad Makengales y se presume que este caso posiblemente esté implicado por el robo de unos equinos que supuestamente la víctima las robó.
Así mismo a 28 kilometros al sureste se encontró el cuerpo de Alejandro Valdivia de 55 años, quien en el hallazgo presentó 10 balazos, cinco de ellos en su cabeza y el resto en su pecho, además presentó seis puñaladas en su brazos y manos en señal de auto defensa. El señor después de ser asesinado fue arrastrado unos metros y dejado dentro de unos matorrales para dificultar que alguien lo encontrara, pero las personas del sector hicieron posible el hallazgo. Este hecho ocurrió en la micro-región de Plan de Grama. Valdivia se destacaba por ser un importante productor de la zona.
A dos kilómetros del anterior suceso sin piedad le quitaron la vida a Melvin Elías González Arauz de 23 años de edad, quien salió el pasado 8 de agosto de su casa de habitación y el día de hoy viernes fue encontrado con un machetazo en su cuello que lo dejó parcialmente decapitado. Al igual que en los casos pasados no se sabe el autor de cada hecho ya que los lugares donde ocurrieron son zonas muy alejadas de la población.
Tras ocurrir estos terribles sucesos se han incrementado la presencia policial en todo el municipio en busca de cada uno de los autores criminales y por ello que el jefe departamental de la Policía Nacional, Comisionado Mayor Marvin Castro, junto con el jefe de la delegación de Wiwilí, subcomisionado Fausto Herrera.
En los próximos días se incrementarán con nuevos puestos policiales en estas zonas rurales que son muy alejadas del casco urbano, para una mejor seguridad y paz de estas personas.