Como decía Tim Minchin, ¿sabes cómo se llama la medicina alternativa que funciona? Medicina. Sin embargo, hay gente que continúa confiando más, en general, en las medicinas alternativas que en la medicina, quizá porque necesitan creer en algo más. Quizá porque no han leído las estadísticas.
Como las que arroja un reciente estudio sobre las personas que se intentan curar el cáncer con medicinas alternativas: doblan la probabilidad de fallecer.
Cáncer y medicina alternativa
Un equipo de investigadores de la facultad de medicina en la Universidad de Yale se ha limitado a analizar los casos de cáncer registrados en la base de datos nacional contra el cáncer y cribarlos en función de los que optan por medicina convencional (radioterapia, quimioterapia y cirugía) y medicina alternativa.
Los segundos, los que optan por terapias no probadas científicamente, tienen más del doble de posibilidades de morir en los cinco primeros años tras el diagnóstico. Dependiendo del tipo de cáncer, el índice de mortalidad es mayor: por ejemplo, para el cáncer de mama, hasta 5,68 veces más mortalidad.
Los resultados son significativos, pero incluso en el caso de que las personas que se tratan con terapias naturales sobrevivieran más que las que se tratan con medicina convencional, ello no significaría nada más que deben elevarse las exigencias de los ensayos clínicos para aprobar una nueva medicina.
Una vez hecho, lo probado siempre resultará más eficaz que lo no probado por esta clase de ensayos que quieren mucho más que la simple intuición, los argumentos de autoridad, las creencias, las tradiciones o el "a mí me ha funcionado" (o le ha funcionado a gente que conozco).
Según Xataka Ciencia, la medicina contemporánea y científica posee un nivel de rigor de la que ha carecido la medicina tradicional: experimentos de tamaño muestral considerable, grupos de control, estudios multicéntricos, aleatorización, doble (y triple) ciego, estadística, etc.
O dicho de otro modo: no importa tanto el contenido de la ciencia contemporánea para evaluarse su eficacia como su epistemología o su metodología. Con todo, continuará habiendo gente que prefiere lo exótico y alternativo a lo convencional y probado porque cree que sabe más que la comunidad científica.