Miami (EE.UU.), 21 ago (EFE).- Un tribunal de apelaciones de EE.UU. confirmó hoy la condena a 40 años de cárcel a un joven de origen yugoslavo condenado por planear un atentado en Tampa (costa oeste de Florida) para vengar la muerte de Osama bin Laden, informaron medios locales.
Sami Osmakac fue arrestado en 2012 después de que comprara explosivos y armas de fuego a un agente encubierto del Buró Federal de Investigaciones (FBI), que le vendió material inservible.
En el juicio, celebrado en 2014, Osmakac fue condenado a 40 años de prisión por los delitos de "intento de uso de armas de destrucción masiva" y "posesión de armas sin registrar".
Ahora, el Undécimo Tribunal de Apelaciones rechazó los argumentos del abogado defensor sobre el hecho de que a Osmakac "le fue negada de forma inapropiada el acceso a material relacionado con la vigilancia" a que el FBI le sometió, recogió el diario Daily Business Review.
Los jueces del tribunal de apelaciones señalaron en su decisión que habían revisado los "materiales" y no encontraron nada irregular en el manejo del caso, agregó el medio.
Tras su detención en 2012, las autoridades estadounidenses hallaron un vídeo de unos ocho minutos en el que el joven explicaba los motivos por los que planeaba los ataques en la zona de Tampa Bay.
En el vídeo, Osmakac dice que la "sangre" de los musulmanes es más valiosa que la de la gente que no cree en el islám y que quiere "hacerles pagar" por todo lo que se ha hecho a los musulmanes, según la acusación.
El joven que nació en la antigua Yugoslavia dijo meses antes de su detención al agente encubierto del FBI que quería comprar granadas, un fusil AK-47, una ametralladora Uzi y un cinturón con explosivos para "matar gente".
Durante una reunión entre ambos, Osmakac le entregó al agente un depósito de 500 dólares por la compra de las armas.
Según la acusación, Osmakac, residente en Florida, también pidió bombas que él pudiera colocar bajo tres vehículos para hacerlas denotar por control remoto.
Osmack dijo al agente encubierto que quería atentar contra clubes nocturnos, el Centro de Operaciones de la oficina del alguacil del condado de Hillsborough y varios locales de negocios en Tampa.