San Salvador, 29 ago (EFE).- El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, y la titular de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), Raquel Caballero, pidieron hoy que el Estado "reaccione de inmediato" ante la ola de ataques a policías, que ha dejado 23 agentes muertos en lo que va de 2017.
Escobar indicó que la situación que se está viviendo en El Salvador "ciertamente es muy grave" y "preocupa, no solo como iglesia, sino como sociedad, porque atacar a la policía es como atacar a la seguridad nacional del país".
El religioso enfatizó que el Estado debe de reaccionar ante esta situación, pero, a criterio de este, no solo el Gobierno debe de actuar sino el Estado con los tres poderes para "de una vez por todas poner fin a estas muertes, porque se está tocando fondo y por lo tanto es necesario tomar medidas de inmediato".
Por su parte, la titular de la PDDH dijo que es necesario que se establezca una coordinación institucional para llegar a la raíz de la situación y "encarar dicha problemática como tiene que ser, articulando los esfuerzos de todos los sectores".
"Estamos en el año de la cultura de paz, del 25 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz y no tenemos paz en nuestro país porque muchos de los problemas serios que atraviesa, entre ellos la violencia, no han sido abordados como deben de ser", manifestó.
Caballero instó a las autoridades a que "hagan un alto en el camino para revisar las medidas que han implementado y a partir de esto establecer nuevos mecanismos de abordaje a esta situación".
Entre la noche del domingo y la tarde de este lunes, menos de 24 horas, tres agentes de la Policía fueron asesinados a tiros en distintas zonas de El Salvador, país que es asediado por las pandillas Mara Salvatrucha (MS13), Barrio 18 y otras minoritarias.
