La situación en el Estado norteamericano sigue siendo "potencialmente amenazante para la vida", destacó este sábado en rueda de prensa el gobernador de Florida, Rick Scott.
El gobernador del Estado de Florida (EE.UU.), Rick Scott, ha anunciado que el huracán Irma ya ha llegado al Estado y que para la noche del sábado al domingo se prevén tornados. Asimismo, ha definido la situación como "potencialmente catastrófica" y de amenaza para la vida de los residentes.
"Esta es una situación que verdaderamente representa una amenaza para la vida", afirmó Scott este sábado en una rueda de prensa sobre el huracán, que se aproxima cada vez más al territorio norteamericano. Según precisó, los vientos de 297 kilómetros por hora de Irma conllevan un peligro considerable para la zona.
Además, Scott informó que actualmente 382 refugios están abiertos en varios condados del Estado y que está previsto que se abran más. "Cada persona en Florida necesita un lugar seguro", recalcó, añadiendo que "necesitamos enfermeras y voluntarios para que ayuden en los refugios".
Así combate Florida la llegada del huracán Irma
El Servicio Nacional Meteorológico de EE.UU. ha emitido este sábado una advertencia de tornados para nueve condados de Florida. La alerta afecta al noreste de la parte continental del condado de Monroe y al oeste del condado de Miami-Dade, entre otras zonas.
Mientras los habitantes de Florida siguen abandonando la región en masa, las autoridades del Estado ha decidido suspender el funcionamiento de dos centrales nucleares, las de Turkey Point y St. Lucie, en el marco de los preparativos para el paso de Irma.
Irma se debilitó a su paso por Cuba, pasando este sábado de categoría 5 a 3, con vientos máximos sostenidos de 205 kilómetros por hora, según informó el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (NHC). Sin embargo, los meteorólogos aseguran que el huracán podría recobrar fuerza para el momento en que toque tierra en Florida.
El huracán, considerado ya como uno de los más fuertes y prolongados jamás registrados en el Atlántico, se ha cobrado ya la vida de al menos 23 personas en el Caribe, y ha forzado a las autoridades de Florida a ordenar la evacuación de 6,3 millones de residentes.