La Policía Nacional de Colombia anunció este lunes que suspendió a cuatro uniformados que presuntamente dispararon en los hechos que provocaron la muerte de seis campesinos cocaleros en una zona fronteriza con Ecuador la semana pasada.
"En aras de la absoluta transparencia de la investigación" se aplicó la "suspensión disciplinaria" a cuatro policías antinarcóticos "que presuntamente accionaron sus armas de fuego" el pasado jueves en el municipio de Tumaco, departamento de Nariño (suroeste), informó la institución en un comunicado.
La Defensoría del Pueblo, que vela por los derechos humanos en Colombia, advirtió el domingo sobre la presunta responsabilidad de la policía en un hecho que el gobierno y la fuerza pública han adjudicado a disidencias de las FARC que se apartaron del proceso de paz.
La violencia del jueves causó la muerte de seis personas, entre ellas dos indígenas, y dejó heridas a otras 20 en Tumaco, la zona en el país con mayor cantidad de cultivos de hoja de coca, base de la cocaína.
Las comunidades campesinas han denunciado que uniformados abrieron fuego contra los manifestantes que rechazaban la erradicación de cultivos ilícitos.
Los suspendidos son "los mandos que están allí directamente involucrados", aunque no son los únicos miembros de la policía y el ejército que abrieron fuego, dijo el lunes a radios locales el general José Ángel Mendoza, director de la policía antinarcóticos.
La violencia fue "provocada por grupos narcotraficantes que en la zona quieren mantener la actividad (…) la intención es hacer ver muy mal a la fuerza pública que no está sino cumpliendo la tarea de erradicar las matas" de coca, señaló Mendoza.
Las autoridades han dicho que un grupo "residual" de guerrilleros forzó a los campesinos a manifestarse, y que este grupo lanzó artefactos explosivos contra policías y militares en medio de la protesta, que según la Defensoría congregó a 1.500 personas.
Sin embargo, una comisión de la Defensoría señaló que no observó evidencias del uso de artefactos explosivos.
Campesinos cocaleros en varios puntos de Colombia, principal productor y exportador mundial de cocaína, se oponen a la eliminación de los narcocultivos por considerar insuficientes las ayudas económicas que ofrece el gobierno a cambio de que siembren productos lícitos.
El presidente Juan Manuel Santos dijo el viernes que su gobierno seguirá con el plan antidrogas pese a la muerte de los cocaleros.