París, 9 oct (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, se opuso hoy a que los refugiados sirios en Líbano regresen a su país debido a que estarán desprotegidos y anunció que Francia ofrecerá en los próximos años 10.000 plazas de refugiados instalados en Turquía, El Líbano, Jordania, Níger y Chad.
En una reunión con el alto comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, Macron se posicionó contra la propuesta del presidente de El Líbano, Michel Aoun, que ha abogado por un retorno de los sirios que están refugiados en su país.
"Nuestra voluntad es que los refugiados están totalmente protegidos y no apoyaremos ninguna acción que lleven a una salida súbita de refugiados sin que todas las garantías estén encima de la mesa y la estabilidad política esté asegurada", dijo Macron, quien reconoció "la carga altamente significativa" de refugiados sirios que soporta ese país.
Esta antigua colonia francesa, de solo 6 millones de habitantes, alberga actualmente a 1,2 millones de refugiados, la mayoría de ellos exiliados de la guerra civil siria.
Organizaciones internacionales como la ONU ya han avisado de que el Líbano está desbordado y necesita más ayuda por el alto número de refugiados sirios.
Macron lamentó que su país no haya cumplido con los compromisos de acogida de refugiados y adelantó que en los próximos años aceptará, con la colaboración del alto comisariado de la ONU para los Refugiados, hasta 10.000 procedentes de campos de Turquía, Líbano, Jordania, Níger y el Chad.
En contexto
Varios episodios de tos dejaron a la primera ministra británica, Theresa May, afónica y sin palabras en pleno discurso en el congreso del Partido Conservador en Manchester (norte de Inglaterra).
La líder "tory" ha tenido que interrumpir varias veces su intervención, considerada clave para demostrar su autoridad tras perder la mayoría absoluta en las pasadas elecciones y restablecer los objetivos de la formación, sumida en luchas internas por el "brexit" y el avance de la oposición laborista.
Los continuos ataques de tos sufridos por May, que le provocaron ahogos, fueron recibidos con aplausos de ánimo y creciente preocupación por los asistentes.