Las dietas bajas en carbohidratos han alcanzado popularidad desde hace ya un buen tiempo. Esto se ha traducido en una considerable reducción del consumo de la pasta, el pan y demás granos.
Sin embargo, no todos los granos son iguales y varía mucho en el organismo si cortamos granos refinados, integrales o carbohidratos.
El pan es el alimento con carbohidratos que más se recomienda evitar, por su capacidad de generar hinchazón y aumentar de peso. ¿Pero sabes realmente qué beneficios o consecuencias tiene dejarlo por completo?
Logras reducir los líquidos del organismo
Reducir la ingesta de carbohidratos logra disminuir el peso. Asimismo, no es grasa lo que perdemos sino agua. Los carbohidratos se almacenan en el cuerpo en forma de glucógeno y cada gramo de carbohidratos almacena de tres a cuatro veces su peso en agua.
Implicar cortar con una gran fuente de energía
Los carbohidratos son la principal fuente de energía del cerebro, y al reducirlo, las reservas de glucógeno se agotan. Cuando se haya reducido completamente, el cuerpo experimentará cansancio, debilidad, insomnio, mareos, náuseas, mal aliento y debilidad. El cuerpo siente como si estuviera pasando por una gripe.
Los granos integrales son una gran fuente de hierro, magnesio y vitamina B, que logran mantener los niveles de energía. Y dado que los carbohidratos son el combustible predilecto por nuestro cuerpo, las células se ralentizan sin un suministro saludable.
Constipación y malhumor
La fibra presente en los granos enteros ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre, reduce el riesgo de obesidad y de enfermedades crónicas, pero además mantiene los hábitos habituales del baño. Por eso cuando cortamos los carbohidratos, podemos experimentar constipación.
Además, los carbohidratos, complejos o refinados, aumentan los niveles de neurotransmisor de serotonina que hacen que nos hace sentir bien, y cuando los reducimos, la salud mental se ve afectada.
¿Riesgo de enfermedades?
Dependiendo de los tipos de granos que consumimos podemos aumentar o disminuir los riesgos de enfermedades cardíacas y diabetes.
Los carbohidratos refinados logran impulsar los niveles de un ácido graso (ácido palmitoleico) del cuerpo para aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca y diabetes de tipo 2.
Mientras que los cereales integrales pueden mejorar los niveles de colesterol en la sangre y reducir el riesgo de enfermedades del corazón, diabetes, obesidad y derrame cerebral.
Al ser la principal fuente de energía del cuerpo son el combustible necesario para el ejercicio y el entrenamiento de resistencia. Al reducirlos, la capacidad del cuerpo de producir fuerza y energía disminuye.
Saber elegir
Sin duda es conveniente reducir el consumo de aquellos carbohidratos que aumentan nuestro peso y pueden ser dañinos para el organismo.
Pero es fundamental entender que no todos los panes son iguales y algunos tipos de panes y granos son realmente beneficiosos para el organismo.
Lo mejor es mantenerte alejado del pan blanco y las harinas refinadas. Mientras que los granos enteros son beneficios para perder peso y mantenerte saludable.