Pese al calor, Clayton Kershaw conservó la frialdad durante su debut en la Serie Mundial, y su estupenda faena guio el martes a los Dodgers de Los Ángeles hacia una victoria por 3-1 sobre los Astros de Houston, en el primer juego del Clásico de Otoño.
Kershaw debió cambiarse el jersey empapado en sudor durante una noche en que el termómetro llego a 39 grados centígrados (103 Fahrenheit). Pero logró congelar el bateo de los Astros, con lo que siguió olvidándose de la mala fortuna que había tenido en sus años anteriores durante los playoffs.
Un jonrón de Justin Turner produjo dos carreras para romper el empate en la sexta entrada ante Dallas Keuchel. Y Kershaw tuvo control absoluto de la situación ante el equipo que más carreras anotó esta temporada en las mayores.
El as había esperado toda su carrera para que llegara este momento. Y una vez que subió a la lomita para su primer encuentro de Serie Mundial, lució como un digno heredero de Sandy Koufax, Orel Hershiser y todos los grandes pitchers en la historia de los Dodgers.
Galardonado tres veces con el Cy Young, Kershaw recetó 11 ponches, la mayor cantidad de un pitcher en un primer juego de la Serie Mundial desde 1968. Permitió apenas tres hits y no dio un solo boleto a lo largo de siete capítulos. Su tremenda curva hizo que los bateadores de Houston lucieran torpes en más de una ocasión.
El único descuido de Kershaw derivó en un jonrón de Alex Bregman que empató la pizarra 1-1 en el cuarto acto.
Chris Taylor dio la ventaja a los locales, al encontrar el primer lanzamiento de Keuchel en el duelo para disparar un cuadrangular.
Brandon Morrow resolvió a la perfección el octavo inning, en tanto que Kenley Jansen retiró en orden a los Astros en el noveno para acreditarse el salvamento, coronando una faena combinada de tan sólo tres inatrapables.
Dominantes, los relevistas de los Dodgers han lanzado 25 innings consecutivos sin tolerar anotación en esta postemporada.
Un entusiasta público acudió al primer encuentro de Serie Mundial disputado por los Dodgers de 1988. Como recompensa, los espectadores recibieron un motivo inmediato de celebración, el bambinazo de Taylor, quien compartió con Turner el premio al Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Ante los Astros, ambos siguieron haciendo contacto.
La derrota deja a Houston sin un solo triunfo en el Clásico de Otoño en su historia de 56 temporadas. La única vez anterior que llegaron a estas alturas, los Astros fueron barridos por los Medias Blancas de Chicago en 2005.
El segundo juego está previsto para este miércoles. Justin Verlander, el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, subirá a la lomita por los Astros, para enfrentar al zurdo Rich Hill.
Por los Astros, los venezolanos José Altuve de 4-1, Marwin González de 3-0. Los puertorriqueños Carlos Correa de 3-0, Carlos Beltrán de 1-0. El cubano Yuli Gurriel de 3-0.
Por los Dodgers, el cubano Yasiel Puig de 3-0. El puertorriqueño Kike Hernández de 3-1.