Cada mañana al despertar nos encontramos con el mismo dilema, ¿qué ponernos para ir a la oficina, estar correctas y desprender estilo? A veces nos podemos ofuscar y no encontrar la solución a ese teorema, pero hoy te enseñamos propuestas que quizás (con suerte) inspiren tus jornadas.
¡Basta de parecer una oficinista más!. En tu primera aparición en la oficina vas a marcar un antes y un después. Conseguirás crear el perfecto y, sobre todo, apropiado estilo para ir a trabajar sin renunciar a ir favorecida y chic. Eso que dicen de que ‘el estilo es la manera en la que decir quién eres sin tener que decir nada’ es tu nueva meta para esta temporada. Y ten por seguro que el tuyo va a gritar: ¡Soy profesional, buena en lo que hago y, sí, visto mejor que tú!
Es el año del traje-pantalón y las firmas nos proponen muchos modelos donde el diseño está presente. Elige una versión en un color llamativo o estampado y marcarás la diferencia.
Los pantalones de traje toan una nueva dimensión cuando se presentan en tiro alto. Feminidad, originalidad y estilo se aúnan en una sola prenda que se convierte en la protagonista del outfit final. Combínalos con un sencillo jersey de cuello alto o una blusa de líneas rectas y el éxito vendrá solo.
El blazer (o americana) es la chaqueta perfecta por excelencia. Es más versátil de lo que parece y su sola presencia ensalza el look a lo más alto.
Desprender estilo sin necesidad de arreglarnos mucho solo nos lleva a un estilismo posible: vaqueros, camiseta de algodón y americana. Los zapatos determinarán qué rollo le damos al outfit final.
A tener en cuenta para triunfar con tus looks de trabajo:
1-Modernizar el traje pantalón: apuesta por nuevos cortes, chaquetas oversize y pantalones diferentes. Y no, no tienes que comprar el traje completo. Busca mezclar texturas, estampados, nuevas siluetas y volúmenes.
2- Apuesta todo a un color: si vistes de un solo color conseguirás –lo creas o no–, alargar ópticamente tu figura. ¡Ojo! Aquí entran en juego varios factores que determinan el color a elegir. Tu color de piel, tu constitución y el buen gusto. Por muy alegre que resulte el amarillo, tal vez no sea el color más apropiado para ir a trabajar. Sólo te digo que el azul marino es el nuevo negro y el marsala sigue siendo el color del año.
3- Los culottes es la nueva falda midi: este tipo de falda sorprendentemente queda bien a casi todo el mundo y lo sabes. Ahora hay que dar un paso más, combina unos pantalones culottes con un blazer y zapatos de tacón. Es casi como llevar una falda midi pero consiguiendo un estilo mucho más interesante.
4-Un blazer, mil looks diferentes: ya hemos dicho que esta chaqueta es un básico imprescindible en cualquier época del año. Es hora de comprarte uno de la máxima calidad que puedas porque va a terminar por convertirse en tu prenda fetiche por su versatilidad y lo bien que te queda.
5-La parka militar es la nueva gabardina: es muy difícil decir no a la gabardina en esta temporada, pero resulta un poco aburrido ver a las 7 de la mañana a todo el mundo con ella puesta. Por eso, puedes darle un descanso alguna vez y atreverte a cambiarla por una parka militar. Pero no una cualquiera, por supuesto.
6-Un bolso en el que invertir: en serio, cuantos bolsos tienes y ninguno es el bolso de tus sueños. Si haces cuentas del dinero que te has gastado en bolsos ‘medio buenos’ ya tendrías el que sueñas desde hace años. Sé más fuerte que tus impulsos primarios, ahorra e invierte en un bolso que te pondrás en todo momento y que con solo verlo te alegre el día.
7-Deja de sufrir por los zapatos: la vida es miserable si desde que sales de casa llevas un mal calzado. Primero si te hacen daño, y segundo porque ese par que te acabas de comprar lo tienen todas tus compañeras de trabajo. Apuesta por comprarte unos zapatos clásicos, cómodos y bonitos. Exiten, no es una utopía. Solo tienes que dejar de comprar a granel e invertir. De verdad, cuenta los pares de zapatos que tienes en el armario –y sé sincera contigo misma–. Sabes que con todo lo que has gastado (y solo contando los pares que no te pones) ya tendrías al menos un par de esos zapatos que te hacen soñar a cada paso que das.
8-La camiseta como alternativa a la camisa: la camiseta es un básico mal entendido. Si la llevas con el blazer adecuado, un pantalón bonito y acertado para la oficina y unos zapatos salón, no sólo modernizaras tu estilismo, sino que te sentirás más cómoda pero igualmente chic (o más).
Si estás buscando la manera de inspirarte para solventar eso del qué me pongo para ir a trabajar, aquí tienes tu guía donde los clásicos como chaquetas, pantalones o loafers se convierten en básicos de oficina que te ayudarán a crear tu propia declaración de estilo.