El videojuego más popular del mundo está listo para ser excluido del mercado más grande.
Una asociación de juegos china ha dicho, a través de un comunicado publicado en Internet, que el producto PlayerUnknown's Battlegrounds es demasiado violento y sangriento como para que esté disponible para la venta y la distribución en el país. En el videojuego, ambientado en la lucha gladiadora, los competidores se matan entre sí hasta que solo queda uno, desviando así los valores de la socialización y siendo muy perjudicial para los consumidores más jóvenes, tal y como apunta la Asociación Audiovisual y de Publicaciones Digitales de China.
Es muy poco probable que el juego, conocido como PUBG, reciba una licencia oficial para su comercialización en China, dado que la asociación consultó con la Administración Estatal de Prensa, Publicaciones, Radio, Cine y Televisión (SAPPRFT) antes de emitir su declaración. La SAPPRFT es el órgano regulador que autoriza prácticamente todo el contenido en China y, anteriormente, ya ha prohibido algunos productos como la serie de televisión BoJack Horseman y The Big Ban Theory. La premisa de PUBG va en contra de los recientes llamados de unidad del presidente Xi Jinping, dirigidos a reforzar el control de los partidos.
"Esto básicamente supone la pena de muerte para PUBG en China. El principal problema de ese juego es que la ideología subyacente choca con lo que se predica en China" remarca Benjamin Wu, analista de la consultora Pacific Epoch, con sede en Shanghai.
PUBG, publicado por Southhole's Bluehole Inc., se ha convertido en la sorpresa de la industria del juego este año ya que ha vendido más de 13 millones de copias en todo el mundo. El título se vende por alrededor USD 30 por copia y se reproduce a través del PC.
Existe un creciente interés entre los jugadores chinos por tener entre sus manos un ejemplar de PUBG, pero el juego ha carecido de la aprobación oficial para su distribución. Eso significa que los usuarios solo pueden descargar y ejecutar el juego a través de redes privadas virtuales, que son lentas y, a menudo, bloqueadas. Tencent Holdings Ltd., la mayor empresa de juegos de China, estaba en conversaciones para comprar derechos de licencia, según ha afirmado la compañía surcoreana recientemente. Ninguna de las empresas respondió a las solicitudes de comentarios al respecto.
No todos los juegos violentos están prohibidos en China. Uno de los juegos más populares del país es Honor of Kings, que comercializa el gigante chino Tencent, en el que equipos de cinco personas se abren paso en una batalla para vencer a sus oponentes. Pero los personajes son caricaturescos, mientras que los de PUBG son realistas.
El título coreano es como una versión digital de The Hunger Games, donde 100 combatientes son arrojados a una isla y se matan entre ellos. El regulador de contenido de China se opone firmemente a los juegos de muerte y les costará mucho ganar licencias de operación, según el organismo de la industria. La asociación también recomendó que las empresas chinas no desarrollen dichos juegos y desaconsejen la transmisión en vivo de contenido relacionado.