Horas antes de que los Celtics ingresaran en la cancha para exponer su racha victoriosa contra los campeones vigentes de la NBA, Jaylen Brown estaba apesadumbrado.
El alero de segundo año no pensaba siquiera en el basquetbol. Se había enterado de la muerte repentina del mejor amigo de su infancia, Trevin Steede, ocurrida el miércoles por la noche.
“Fue difícil aceptar esto”, reconoció Brown. “Yo estaba como en ‘shock’”.
Pero luego de hablar con su familia y con el entrenador Brad Stevens, Brown encontró consuelo jugando al basquetbol. El joven de 21 años terminó brindando uno de los mejores encuentros de su carrera.
Brown sumó 22 puntos y siete rebotes, Kyrie Irving anotó 16 unidades, incluidas 11 en el cuarto periodo, y Boston logró su 14ta victoria consecutiva, al imponerse el jueves 92-88 sobre los Warriors de Golden State.
Irving convirtió un par de tiros libres que dieron la ventaja a Boston en los últimos segundos. Jaylen Brown colaboró con 22 puntos y siete rebotes, mientras que el dominicano Al Horford totalizó 18 unidades y 11 balones capturados ante los tableros.
“Él me inspiró para salir a jugar, y lo hice en su honor”, dijo Brown, en referencia a Steede.
Brown dijo que no se esclarecen todavía las circunstancias de la muerte de su amigo, y se negó a emitir más comentarios, por respeto a la familia. Después del encuentro, Irving abrazó a Brown.
“Ky me dio el balón con el que jugamos, y me dijo ‘éste va para Trevin’”, relató.
Kevin Durant sumó 24 tantos por Golden State, que vio cortada una racha de siete triunfos seguidos.
En su segundo partido desde que sufrió una fractura en el rostro, Irving arrojó su máscara protectora en el segundo periodo. Con el marcador igualado a 88, recibió una falta en un intento de bandeja, y convirtió serenamente los dos disparos desde la línea.
Luego, Durant falló un disparo en el otro extremo de la cancha.
Golden State llegó a tener una delantera de 17 puntos, pero tuvo que depender de sus reservistas. Su trío estelar, formado por Stephen Curry, Klay Thompson y Durant, no encontró la puntería durante la noche.
Curry, quien volvió luego de perderse un compromiso por un golpe en el muslo derecho, fue el peor. Atinó apenas tres de 14 disparos de campo y dos de nueve triples, para contabilizar nueve puntos.
“Sólo fue una de esas noches”, concluyó Curry. “Tuvimos el control del partido pese a lo mal que disparamos, pero no pudimos resistir a la defensiva”.