Tegucigalpa, 7 dic (EFE).- El Fondo Mundial de Lucha contra el sida, tuberculosis y malaria formalizó la donación de más de 5,3 millones de dólares a Honduras para el combate de esa tercera enfermedad en los próximos tres años, informó hoy una fuente oficial.
Esos recursos permitirán financiar el trabajo de prevención, tratamiento y otros servicios sanitarios fundamentales para los enfermos en Honduras, indicó un comunicado del Ministerio de Salud del país centroamericano.
Señaló que los recursos se ejecutarán en el período 2018-2020 y se utilizarán para fortalecer los sistemas de vigilancia epidemiológica de Honduras.
La malaria es una enfermedad transmitida a través de la picadura del mosquito "Anopheles".
El proyecto también permitirá que las autoridades sanitarias de Honduras apliquen una campaña de distribución de mosquiteros, fumigación del interior de viviendas y realicen un "diagnóstico oportuno" de la enfermedad, según la información.
El país centroamericano ha logrado reducir en un 90 % los casos de malaria en los últimos 15 años, pero ahora busca alcanzar "la eliminación de la transmisión autóctona" de la enfermedad, añadió el Ministerio de Salud.
El año pasado Honduras sumó 4.097 casos confirmados de malaria y el 95 % de los enfermos se registró en los departamentos de Gracias a Dios, Colón, Islas de la Bahía, Atlántida, Cortés, Yoro y El Paraíso, occidente, Caribe, norte y oriente del país, según cifras oficiales.
La malaria es causada por un parásito que se transmite a los humanos a través de la picadura de mosquitos anofeles infectados. Después de la infección, los parásitos (llamados esporozoítos) viajan a través del torrente sanguíneo hasta el hígado, donde maduran y producen otra forma de parásitos, llamada merozoítos. Los parásitos ingresan en el torrente sanguíneo e infectan a los glóbulos rojos.
Los parásitos se multiplican dentro de los glóbulos rojos, los cuales se rompen al cabo de 48 a 72 horas, infectando más glóbulos rojos. Los primeros síntomas se presentan por lo general de 10 días a 4 semanas después de la infección, aunque pueden aparecer incluso a los 8 días o hasta un año después de esta. Los síntomas ocurren en ciclos de 48 a 72 horas.
