Varias actrices como Nicole Kidman u Oprah Winfrey ofrecieron discursos combativos en contra de los abusos sexuales cometidos contra las mujeres en Hollywood y la disparidad salarial en la industria.
La desigualdad de género y los abusos contra las mujeres, temas desestimados en la sociedad estadounidense y que son producto de un sistema opresor, fueron puestos en la escena de la 75 edición de los premios organizados por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), los Globos de Oro.
Los combativos discursos de la presentadora Oprah Winfrey o la actriz Nicole Kidman y los chistes ácidos del presentador Seth Meyeres, hicieron eco de la denuncia y condena pública hacia las agresiones sexuales contra las mujeres.
"Queremos diversidad, queremos paridad de género interseccional, queremos cobrar lo mismo. Me sorprendió el saber que E! no cree en pagar lo mismo a sus presentadoras que a los presentadores", dijo la actriz Debra Missing al ser entrevistada por presentadores de E! en la alfombra roja.
Añadió: "Estamos con Catt Sadler, que renunció a su puesto de trabajo como presentadora en E! luego de enterarse que su compañero, Jason Kennedy, ganaba más dinero que ella".
Por su parte, Winfrey aseguró que el legado de los "hombres poderosos y brutales" que dominaron durante mucho tiempo había llegado a su fin.
El aplauso acompañó a las palabras de la actriz que recordó el caso de Recy Taylor, que fue secuestrada, violada y abandonada en 1944 por un grupo de hombres blancos que no fueron condenados.
Oprah Winfrey recibió en 2012 el premio Jean Hershot de la Academia de Hollywood por su trabajo humanitario. Fue nominada al Óscar y al Globo de oro por su papel en "The Color Purple" ("El color púrpura") de 1985.
Oprah envió su felicitación a las valientes mujeres que hicieron públicas sus experiencias, en específico, las que en 2017 hablaron de los abusos sexuales en Hollywood, aunque este tema, dijo la actriz, afecta todas las culturas, razas y sectores, las mujeres tuvieron que aguantar "años de acoso y maltrato porque tenían hijos que alimentar, facturas que pagar y sueños que hacer realidad".
Barbra Streisand, que anunció el premio a la mejor cinta dramática, aprovechó la ocasión para denunciar que ella es la única mujer que ganó el Globo de Oro a mejor directora, galardón que recibió en 1984 por "Yentl".
"Eso fue hace 34 años. Amigos, se acabó el tiempo. Necesitamos más mujeres cineastas y más mujeres nominadas a mejor directora", afirmó en la edición en la que las nominaciones a realizadoras estuvieron ausentes.
Kidman, que triunfó con la miniserie "Big Little Lies", recordó que su personaje era una mujer maltratada que representaba los abusos que ahora son el centro de la conversación en Hollywood tras el escándalo del productor y director de cine, Harvey Weinstein.
Las agresiones sexuales de Weinstein inspiraron al movimiento Me too, iniciado por la activista Tarana Burke en 2006 y que impulsa a las mujeres a ser solidarias con las demás compañeras, específicamente cuando se trata de abusos sexuales.
En este sentido, las actrices que subían al escenario iban acompañadas de una activista. Como Susan Sarandon que subió acompañada de Rosa Clemente, periodista y activista pro medioambiente, Emma Watson con Marai Larasi, activista de género, Meryl Streep con Ai- jen Poo, directora de la Alianza Nacional de las Trabajadores Domésticas o Michelle Williams con Tarana Burke, también directora de Chicas por la Igualdad de Género.
La edición fue abierta por el humorista Seth Meyers que lanzó varios chistes ácidos sobre los abusos sexuales en Hollywood.
"Es 2018. La marihuana está permitida por fin en California y el acoso sexual ya no. ¡Será un buen año!", ironizó el maestro de ceremonias.