Descontaminar el aire podría traer consecuencias nefastas para la Tierra debido a que podría empeorar el calentamiento global y causar efectos climáticos extremos, advierte una investigación publicada en la revista Geophysical Research Letters y citada por Scientific American.
La contaminación atmosférica ayuda a enfriar el clima, evitando parte del calentamiento global. Ciertos aerosoles ?que son contaminantes emitidos a menudo por actividades industriales? como por ejemplo los sulfatos, protegen a la Tierra de parte de la radiación solar. De ese modo, señalan, eliminar las emisiones de aerosoles podría provocar un calentamiento global adicional de entre 0,5 y 1,1 grados. Esto es importante teniendo en cuenta que la Tierra ya se ha calentado en un grado.
Para llegar a esta conclusión, los científicos utilizaron cuatro modelos climáticos globales, simulando los efectos que ocurrían tras la eliminación de todas las emisiones de los principales aerosoles causadas por los humanos, incluyendo los sulfatos y las partículas a base de carbón como el hollín.
Además, los investigadores hallaron que la eliminación de emisiones de aerosoles tendría consecuencias regionales, causando cambios significativos en las precipitaciones y otros patrones climáticos en ciertas partes del mundo. Y los lugares donde la contaminación del aire es más grande experimentarían efectos climáticos más fuertes. Por ejemplo, Asia Oriental podría experimentar un fuerte aumento de las precipitaciones y de fenómenos meteorológicos extremos, concluye el estudio.
En contexto
Por otro lado, la vida en Marte siempre ha intrigado a la comunidad científica. Desde mediados del siglo XIX ya se especulaba sobre este hecho, y a partir de entonces, se ha trabajado por encontrar por fin una respuesta clara.
Actualmente, en plena era tecnológica, unos investigadores han dado un paso hacia delante en este intrigante cuestión. Por primera vez, se ha desarrollado una tecnología capaz de detectar y caracterizar directamente la vida en Marte y otros planetas.