Un nicaraguense junto a un amigo que se ganaban el pan de cada día trabajando como agentes de seguridad en Costa Rica perdieron la vida de manera trágica tras colisionar el vehículo en el que viajaban contra un puente y posterior tomar fuego hasta quedar completamentes calcinados.
Keneth Carranza Vega y José David Obando Mendoza, de 26 y 48 años respectivamente, perdieron la vida este miércoles en la madrugada tras ser víctimas de un accidente de tránsito en Balsar de Osa.
Los hombres perdieron el control del vehículo en el que viajaban en una curva sobre la carretera Costanera Sur, eso los hizo estrellarse contra el puente conocido como La Olla y, debido al fuerte impacto, el carro se incendió.
El bombero José Daniel Badilla, de la estación de Palmar Norte, confirmó a La Teja la lamentable situación y agregó que la alerta fue recibida a las 3:33 de la madrugada de este miércoles.
"Cuando llegamos el carro estaba envuelto en llamas, la Cruz Roja nos notificó de dos posibles víctimas. Cuando controlamos el fuego, lamentablemente confirmamos la muerte de ellos", explicó Badilla.
El agente de tránsito, William Murillo, también atendió el accidente y señaló que no descartan que el exceso de velocidad haya sido una de las causas de esta trágica muerte, pues en el lugar no encontraron huella de frenado.
Cabe destacar que el puente está en una zona bien demarcada y que el vehículo primero se pasó al carril contrario y luego impactó la baranda. Asimismo se confirmó que los fallecidos viajaban en sentido San José – Paso Canoas.
Berny Vega, primo de Kenneth, contó que su pariente trabajaba como custodio en una empresa de seguridad y que tanto él, como la otra víctima, (el nicaragüense) debían llegar a la frontera y luego brindar seguridad, no especificó de qué artículos.
"Él había entrado a trabajar desde el lunes anterior, no sabemos la hora ni el lugar de dónde salieron, nos enteramos del accidente por las noticias", explicó Vega.
Otros compañeros de trabajo de las víctimas, quienes viajaban en otro vehículo, le dijeron a las autoridades que eran empleados de la empresa Comsica, que brinda seguridad en toda Centroamérica.
Asimismo muy consternados mencionaron que iban unos 600 metros adelante y al escuchar el estruendo se devolvieron.
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Cabe señalar que Kenneth Carranza era oriundo de Guápiles, pero vivía en San José, y dejó tres hijos menores de edad, mientras tanto Obando era oriundo de Nicaragua, pero vivía en Alajuela.
