Nueva Delhi, 21 abr (EFE).- El Gabinete del Gobierno indio dio hoy luz verde a una enmienda de la Ley de Protección de Niños de los Delitos Sexuales para que los culpables de violaciones de menores 12 años puedan ser condenados a muerte, en medio de la indignación del país por el abuso y asesinato de una niña de 8 años.
La propuesta de enmienda de la ley POCSO (por sus siglas en inglés) fue aprobada en una reunión del Gabinete encabezada por el primer ministro, Narendra Modi, apenas horas después de regresar al país tras una gira por tres países de Europa, informaron agencias locales.
La enmienda legal, que ya había sido pedida públicamente por la ministra para la Mujer y la Infancia, Maneka Gandhi, llega en medio de la conmoción que vive el país tras el secuestro, tortura, violación y asesinato de una niña musulmana de 8 años de una comunidad nómada en el estado septentrional de Jammu y Cachemira.
La niña murió en enero pero las circunstancias del crimen salieron a la luz la semana pasada después de que la Policía de Cachemira presentara el pliego formal de acusaciones en el que ha apreciado, además, indicios de violencia religiosa.
Ocho personas, incluidas cuatro miembros de los cuerpos de seguridad han sido detenidos y están siendo procesados en el marco del juicio por este caso, que comenzó el pasado lunes.
Este caso y la muerte tras recibir una paliza hace dos semanas del padre de una menor de 16 años que había sido violada en junio de 2017 en un crimen del que la familia acusa a un parlamentario regional del partido gobernante BJP en Uttar Pradesh, encendieron la indignación en el país.
De acuerdo con datos de la Agencia Nacional de Registro de Delitos de la India (NCRB), el número de delitos contra niños se ha duplicado entre 2013 y 2016 pasando de 58.224 a 106.958 y de las 38.947 violaciones que se produjeron en el país en 2016 en 19.765 las víctimas fueron menores.