Dos hombres asesinaron a machetazos a dos mujeres y a dos niños que se encontraban dentro de una pulpería al que llegaron los ahora detenidos a robar el dinero recaudado producto de las ventas.
Cuatro personas fueron brutamente ultimadas a machetazos por dos sujetos que andaban en estado de ebriedad, quienes les quitaron la vida para robarles el dinero de una pequeña pulpería.
Las víctimas son una niña de seis años, un menor de cinco y dos mujeres, una de ellas que tenía cuatro meses de embarazo.
El condenable hecho sangriento ocurrió a las 6:00 de la tarde del sábado, en el interior de una pulpería de la comunidad de El Prado, municipio de Trojes, departamento oriental de El Paraíso, cerca de la frontera con Nicaragua.
Las víctimas fueron reconocidas como Nelly Cárcamo Sosa (32), su pequeño hijo, José Alberto Vásquez Martínez (5); Laura de Jesús Martínez Sierra (50) y su nieta, Karla Sofía Muñoz Martínez (6), destacó La Tribuna.
Por el momento se conoce que el par de delincuentes llegaron a la pulpería de Cárcamo Sosa y para despistar le dijeron que les vendiera dos lociones, luego la obligaron a que les entregara el dinero de las ventas, pero la mujer se negó.
Al momento del atraco llegó a comprar la señora Laura de Jesús, quien iba acompañada de tres nietas, a quienes los maleantes también les ordenaron que se metieran a la cocina de la casa, pero en un descuido una de las niñas se refugió bajo una cama, de donde escuchaba que los victimarios macheteaban y apuñalaban a su abuela y las demás personas.
Otra de las nietas de doña Laura se hizo la muerta en el piso para que los criminales creyeran que no habían dejado a nadie con vida y cuando los malhechores se fueron una de las niñas salió corriendo a contarle lo ocurrido a una tía, mientras la otra pequeña tomó un teléfono para alertar a sus parientes.
Te recomendamos: Detienen a tiquilla por grabar videos pornos con menor
El cuerpo de Cárcamo Sosa estaba junto al de la niña Karla Sofía, mientras los cadáveres de doña Laura Martínez y el menor José Alberto estaban a unos metros de distancia.
Luego de constatar la veracidad del hecho sangriento, procedieron a comunicarle lo sucedido a la Policía asignada a Trojes, cuyos agentes en poco tiempo se apersonaron al lugar, donde las niñas sobrevivientes les manifestaron que ellas sabían quiénes eran los criminales, porque los habían visto.
Los dos asesinos ya fueron detenidos por la Policía.