Un conjunto de pobladores que habitan en la Colonia Miguel Bonilla, frente a la UNAN-Managua, salieron la mañana del viernes a reclamar por los tranques y la ocupación que jóvenes han realizado en este recinto.
El grupo de personas, sobre todo mujeres, acomodaban los adoquines que estos jóvenes habían levantado en forma de barricada, afectando la libre circulación a la cual tienen derecho todos los nicaragüenses. Ante el intento pacífico de los pobladores por restaurar el orden y la paz en este sector, los supuestos universitarios respondían lanzando bolsas de agua mientras se escuchaban morterazos para intimidar.
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En una sola voz se escuchaban proclamas de "No Más Tranques", "Queremos la Paz", "Queremos Estudiar"; muestras del sentimiento generalizado que existe en el país por estos actos delincuenciales, en donde jóvenes se han querido apoderar de las calles y de las universidades, impidiendo que en Nicaragua se pueda restablecer la calma y serenidad que tanto necesita esta nación que ha sufrido mucho por la violencia.
La actitud agresiva por parte de los jóvenes que están dentro de la universidad no se hizo esperar, ya que gritaban improperios en contra de la inocente población y en un momento intentaron atacarlos por detrás, todos encapuchados y armándose de morteros para aterrorizarlos. Los habitantes solo estaban armados con pancartas y sus voces, ya que mantienen una posición cívica de reclamo ante los tranques.
"Si a nuestro pueblo lo representan ellos, que respeten los derechos de los pobladores de esta colonia, de la libre circulación. Que vean eso si es que verdaderamente respetan al pueblo. Tienen su derecho de decir sus inquietudes pero que lo hagan con respeto a los demás", dijo un poblador angustiado por toda esta situación.
A pesar de las constantes amenazas que se escuchan en el video en vivo grabado por un ciudadano, los pobladores se organizaban para seguir trabajando por liberar los tranques ubicados en esa pista, ya que no aguantan más sentir que un grupo de jóvenes violentos los tienen secuestrados sin poder salir libremente de sus hogares.
