Edificios públicos y privados, teatros, museos y bibliotecas abrieron sus puertas este domingo en Chile con el fin de exhibir sus tesoros y curiosidades históricas atrayendo a más de medio millón de personas que realizaron largas filas para visitarlos en el día del Patrimonio.
Las calles del centro de Santiago, habitualmente casi desiertas el fin de semana, se vieron desbordadas por familias enteras que acudieron a cada uno de los cerca de 500 edificios históricos dispuestos por el Ministerio de Cultura para ser visitados entre sábado y domingo, hasta donde llegaron más de 500.000 personas, según cifró la Intendencia de la capital chilena.
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"Estamos muy contentos, porque miles y miles de compatriotas han recorrido, han visitado, han apreciado, han podido conocer mejor lo que es nuestra arquitectura, nuestra historia, nuestras tradiciones y nuestra cultura", dijo el presidente Sebastián Piñera, quien realizó una visita guiada al Palacio de La Moneda, la casa de gobierno de Chile desde 1845.
Piñera fue el guía de un grupo de niños y extranjeros en un paseo en el que recorrió los diversos salones de La Moneda, oficinas del Ministerio del Interior, de la Secretaría General de la Presidencia y la Secretaría General de Gobierno que funcionan allí, los dos enormes patios interiores, y hasta la oficina presidencial.
"Incluso se sentaron algunos en el escritorio y en la silla del presidente", afirmó el mandatario.
Este palacio fue creado originalmente para albergar la Casa de Moneda en 1740, durante la época colonial.
Tras ser convertida en casa de gobierno, ha visto pasar gran parte de la historia política chilena, como el 11 de septiembre de 1973, cuando fue bombardeado por militares que destituyeron al entonces presidente Salvador Allende, y dieron inicio a los 17 años de dictadura de Augusto Pinochet.
Pero ingresar a La Moneda no fue fácil. Los visitantes soportaron una fila que se extendía por al menos cinco cuadras y una espera de un mínimo de dos horas.
"Siempre he pensado que debe ser bonita La Moneda y todas sus dependencias (…) la infraestructura, los cuadros, la ambientación, cuán fastuoso es", dijo a la AFP Gloria, una mujer mayor que hizo fila por más de dos horas para conocer el palacio presidencial.