Este lunes durante la 48 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Nicaragua reiteró su firme compromiso por la paz.
El representante de Nicaragua ante esa organización, Luis Alvarado, expresó que "el Gobierno de Nicaragua reitera su vocación de paz y el único camino para conseguirla es a través del diálogo, del establecimiento de la verdad, la justicia y la búsqueda de soluciones que el pueblo demanda".
Señaló que en el marco de la conmemoración de los 70 años de fundación de la OEA, Nicaragua acude a esta magna asamblea, para expresar su firme compromiso con la paz, seguridad y la estabilidad de la nación, "sumida en la actualidad bajo el ataque de la violencia delincuencial, que han generado ciertos grupos políticos de oposición, que conspiran desde la oscuridad con agenda política específica, similares a la utilizadas en otros países de la región”.
Alvarado apuntó que estos ataques se realizan con la finalidad de activar formatos delictivos, para aterrorizar a las familias en franca violación de la constitución y las leyes de la república, al continuar destruyendo la seguridad y la vida de las familias nicaragüenses.
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“Condenamos enfáticamente todos los hechos de violencia, ocurrido del 18 de abril a la fecha en Nicaragua
Alvarado en nombre de la delegación de la República de Nicaragua, extendió sus saludos a los distinguidos Ministros de Relaciones Exteriores y jefes de delegación de los países miembros de la organización, a los observadores permanentes, al Secretario General Luis Almagro, al secretario General adjunto, Néstor Méndez, embajadores de la OEA, representantes de la sociedad civil, prensa internacional.
Manifestó que el pueblo nicaragüense demanda la paz, la que se ha conquistado con tanto sacrificio.
“El pueblo está en las calles demandando su derecho a vivir en paz, seguridad y exigiendo y reclamando su derecho a la convivencia pacífica”.
Saqueo y vandalismo afecta a los nicaragüenses
En su intervención, Alvarado dijo que el saqueo, la confrontación y el vandalismo afectan la vida de todos los nicaragüenses y violan el derecho humano fundamental a la vida, a la seguridad, a la libre circulación a sus centros de trabajo, escuelas, hospitales, centros de salud, afectando los medios de transporte público y privado, en particular los vehículos de primeros auxilios médicos y del cuerpo de bomberos de Nicaragua.
Enfatizó que el llamado de unos cuantos al retorno del dolor y el luto que produce la violencia que conocemos en carne propia, es rechazado firmemente por el pueblo nicaragüense.
Rechazan campañas difamatorias
El representante de Nicaragua ante la OEA, dijo que el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional rechaza categóricamente todas las acusaciones y campañas difamatorias de estos grupos delincuenciales y de los conspiradores que los dirigen y financian, quienes se confabulan para presionar a los distintos sectores de acuerdo con su agenda.
“Estos señores de la violencia denuncian ataques inexistentes, luego producen las víctimas y se nos pretende acusar de acontecimientos dolorosos y trágicos, que no hemos provocado”.
Recordó que en Nicaragua no existen fuerzas de choque, ni grupos paramilitares afines al gobierno, como se pretende hacer creer a la opinión pública internacional, como parte de la campaña de desinformación en contra del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional.
Manifestó que los opositores buscan culpar a las instituciones del orden público y restringir la aplicación del deber constitucional de las fuerzas del orden, de contribuir a asegurar a las familias “buscando con ellos dañar la imagen de Nicaragua en el mundo y destruir la vida y convivencia armonía entre las familias.
Agenda pendiente de respuesta
El compañero Luis Alvarado dijo que desde el día lunes 21 de mayo en la Mesa de Diálogo Nacional, se presentó una agenda, que está aún pendiente de respuesta.
“Es la agenda del pueblo que está sufriendo tranques, es decir bloqueo de carreteras, violencia y que ve cuartado su derecho a trabajar. La agenda del Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional reúne el clamor del pueblo como: eliminar todo los tranques, no a la violencia en todas sus formas y asegurar el derecho al trabajo”
Manifestó que el Presidente de la República, Daniel Ortega Saavedra y el estado nicaragüense, están comprometidos con la investigación y aseguramiento de la justicia alrededor de los hechos de violencia que se han desarrollado en Nicaragua desde el 18 de abril.
Señaló que “los nicaragüenses somos seres de paz y bien, somos un pueblo laborioso, creativo, bondadoso y solidario, somos una nación llena de vigor y gloria, destinada a vivir en paz y seguridad y luchamos por mantenerla”.
Alvarado expresó que han asumido con responsabilidad la implementación de las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, continuamos comprometidos con el fortalecimiento de las instituciones y democracia en Nicaragua, con pleno respeto al marco constitucional, por lo que contamos con el valioso concurso de la Secretaría General de la OEA.
Acuerdo suscrito con la OEA y CIDH
Como expresión de voluntad para avanzar en la investigación y el esclarecimiento de violencias acaecidas en el periodo del 18 de abril hasta la fecha en Nicaragua, el 30 de mayo el Gobierno de Nicaragua suscribió un acuerdo con la Secretaría General de la OEA, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, mediante el cual se constituye un grupo interdisciplinario de expertos independientes de derechos humanos con la finalidad de apoyar las acciones iniciadas por el estado de Nicaragua para este fin.
El Gobierno de la República de Nicaragua reafirma su disposición permanente al diálogo, que asegure la estabilidad, la justicia, el fortalecimiento democrático, el respeto a la constitución, a las leyes y la paz en Nicaragua.
Al finalizar, agradeció y tomó nota de las expresiones de preocupación de diversos países hermanos de la región, por la situación que vive Nicaragua y su llamado al cese de la violencia, libertad de circulación y a la continuidad del Diálogo Nacional.
“Bienaventurado los que procuran la paz, pues ellos serán llamados hijos de Dios”.