Tammy Waddell era una dedicada maestra en Georgia, Estados Unidos, que encontró una original manera de ayudar a sus alumnos, incluso después de su fallecimiento.
Tammy murió el 9 de junio a la edad de 58 años, luego de una larga lucha contra el cáncer de colon, pero en vez de flores, hizo pública su última voluntad en un emotivo obituario: pidió que en lugar de rosas, le llevaran que a su tumba mochilas llenas de útiles escolares para niños desfavorecidos.
Sus amigos, alumnos y familiares entendieron el mensaje, honraron sus deseos y el 12 de junio, día de su funeral, se vieron docenas de mochilas alineadas en los bancos de la iglesia donde se realizó una misa en su honor.
My cousin’s final request at her funeral was Backpacks full of supplies for needy students instead of flowers. A teacher to the end. @TeachersNet @edutopia @EdWeekTeacher pic.twitter.com/eGig25tYwH
— Dr. Brad Johnson (@DrBradJohnson) June 19, 2018
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"Tammy sirvió a los niños y la comunidad del condado de Forsyth durante treinta años como maestra de primaria en las escuelas del condado. Tenía una pasión por la alfabetización y creía que cada niño merecía una oportunidad de aprender", se podía leer en su obituario.
"Las generosas donaciones de mochilas y suministros en su memoria son un homenaje conmovedor", dijo la portavoz del sistema escolar Forsyth Jennifer Caracciolo a Patch.
"Ese día recibimos aproximadamente 130 mochilas llenas de útiles escolares, cualquier cosa que un estudiante necesitaría durante al menos la mitad del año escolar, y siguen viniendo", dijo Paul Holbrook, vocero de la funeraria, a CNN.
Otra foto muestra docenas de educadores que habían enseñado con Waddell, alineados con mochilas para entregar a niños necesitados.
"Ella tenía alrededor de 100 maestros como portadores honorarios de féretros que llevaban las mochilas y las trasladaban a sus escuelas", dijo Johnson. "Fue conmovedor".
