Las precipitaciones y el material volcánico que desciende del cono de Fuego de Guatemala, que el 3 de junio tuvo una gran erupción que dejó 159 muertos, amenazan con dejar incomunicadas varias aldeas y comunidades aledañas.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología advirtió, en un boletín especial, que las fuertes lluvias han generado "lahares moderados" en las barrancas Taniluyá, Ceniza, El Jute y Las Lajas, así como en la parte del desborde donde se encuentra San Miguel Los Lotes, la aldea arrasada en la anterior explosión.
"Es importante recordar que en esta área aún no se cuenta con un canal definido por donde desciendan los lahares, esto puede causar surcos, cárcavas y generar nuevos canales en distintos puntos", advirtió el ente científico.
Los lahares generados este lunes tienen "abundante material fino" y arrastran bloques de dos y tres metros de diámetro, troncos y ramas de árboles de la explosión del 3 de junio, lo que genera vibración a su paso.
"Debido a que las lluvias puedan persistir en los alrededores del volcán, no se descarta la probabilidad de que se generen lahares en la barranca Seca y río Mineral, que son afluentes del río Pantaleón", se concluye en el comunicado.
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Ante esta situación, el portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, David De León, señaló que se ha trasladado la información a los líderes comunitarios de las aldeas cercanas -casi una veintena- ya que "podrían quedar incomunicadas".
MONITOREO POR LLUVIAS: Se registra lluvia leve con tormenta eléctrica en aldea Los Llanos, Villa Canales, Guatemala.
Fuente: Sergio Giron, Delegado Departamental de la CONRED. pic.twitter.com/oCbHSbFtdD— CONRED (@ConredGuatemala) July 31, 2018
El Volcán de Fuego, de 3.763 metros de altura, está situado entre los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez y tuvo el pasado 3 de junio una de las mayores erupciones de su historia dejando 159 muertos, 265 desaparecidos y casi 2 millones de guatemaltecos afectados. ACAN-EFE