TAPACHULA, México / CIUDAD DE GUATEMALA (Reuters) – Un grupo de más de mil centroamericanos en Guatemala se dirigió hacia la frontera con México el martes, mientras una caravana más grande de migrantes ha enfurecido al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se detuvo en el sur de México en su planeado viaje hacia la frontera de Estados Unidos.
Trump se comprometió a comenzar a recortar millones de dólares en ayuda a Centroamérica y calificó a la caravana de México como una emergencia nacional mientras busca aumentar las posibilidades de su Partido Republicano en las elecciones legislativas del 6 de noviembre.
La caravana, en su mayoría migrantes hondureños que huyen de la violencia y la pobreza en el hogar, se encuentra actualmente en la ciudad de Huixtla, en el estado de Chiapas, a unas 31 millas (50 km) al norte de la frontera con Guatemala y a una distancia de 1,100 millas (1,800 millas) de los Estados Unidos.
El gobierno de México dijo en un comunicado el martes que había recibido 1,699 solicitudes de estatus de refugiado, incluidos niños. El gobierno estima que hay alrededor de 4.500 personas en el grupo.
Cientos de migrantes descansaron en Huixtla el martes. Grupos religiosos y empresas donaron ropa, y las autoridades locales proporcionaron vacunas, alimentos y bebidas.
“Cuando escuchamos que venía la caravana (nos unimos) … la gente en Guatemala también está sufriendo la pobreza. Así que esta es una oportunidad para mejorar la vida de mi familia ", dijo Elsa Romero, una madre guatemalteca de cuatro hijos en Huixtla.
Te recomendamos: Caravana de migrantes reanuda marcha por México
El migrante Alexander Fernández dijo que la columna planeaba moverse nuevamente el miércoles temprano.
En la vecina Guatemala, un grupo separado de al menos 1,000 migrantes, también en su mayoría hondureños, se dirigió lentamente a pie desde la ciudad oriental de Chiquimula, dijo un testigo de Reuters. Algunos medios locales ponen el número en la columna por encima de 2,000.
"Sabemos que esto no terminará en unos pocos días, y será un largo progreso de la migración", dijo Mauro Verzeletti, director de la Casa del Migrante, un refugio para migrantes en la ciudad de Guatemala.
Dijo que el refugio había atendido a más de 11,000 migrantes la semana pasada.
Se espera que otras caravanas salgan de América Central en los próximos días, alentados por los informes de que es una forma más segura para que los migrantes emprendan el peligroso viaje hacia el norte.
